El acusado de matar a su pareja de un disparo en Las Gabias (Granada), que se enfrenta a la petición de la Fiscalía de 25 años de prisión por asesinato y tenencia ilícita de armas, ha alegado que iba borracho, que no recuerda detalles y que estará arrepentido "toda la vida".

Ambrosio B.T., acusado de disparar a su mujer una bala que le atravesó el corazón, ha reconocido los hechos durante la primera sesión del juicio que se celebra desde hoy, con un jurado popular, en la Sección Segunda de la Audiencia de Granada.

Como cuestión previa, el Ministerio Público ha modificado un párrafo de su escrito provisional de acusación, en el que pide 25 años de cárcel por un asesinato con el agravante de parentesco y el atenuante de abuso de alcohol y la tenencia ilícita de armas, y ha añadido que el acusado tenía sus capacidades "afectadas".

Los hechos se remontan a la madrugada del 13 de junio de 2017 cuando el acusado disparó a corta distancia a su mujer, que estaba sentada en el sofá del comedor de la vivienda familiar en cuyo piso superior también estaba el hijo de la víctima, dependiente de ella al padecer Síndrome de Asperger.

La defensa del acusado, que ejerce Luis Felipe de las Heras, ha adelantado que modificará también su escrito provisional, en el que calificó los hechos como un homicidio imprudente, para acercarse más al relato presentado por el fiscal.

El acusado ha reconocido que mató a su pareja, aunque ha alegado que había consumido varios litros de cerveza durante todo el día por un problema con el alcohol agravado en las últimas semanas y que había provocado incluso que su hijo se marchase de casa.

"Estábamos bien", ha explicado el acusado, que ha dicho que discutía con la víctima porque él bebía mucho y ella dedicaba su tiempo a juegos en el móvil, "adicciones" por las que ha explicado que se regañaban, discusiones que eran cada vez más frecuentes.

El día de los hechos lo pasaron juntos y en compañía de otra pareja, con la que él bebió, como hizo en un pub cercano a casa antes de regresar al escenario de los hechos.

"Bebía más de la cuenta, muchos litros de cerveza durante días, pero nos queríamos mucho", ha apuntado el procesado, que ha dicho que solo recuerda que estaba borracho y disparó en la puerta.

Ha precisado que no sabe qué pasó, que se puso "muy mal", y ha recordado que tras disparar se fue a casa de su hermana, en Granada capital, y después se entregó a la Guardia Civil.

"Toda la vida voy a estar arrepentido porque la quería mucho", ha relatado entre lágrimas antes de escenificar a petición del magistrado la cercanía y el ángulo con el que disparó a su mujer, que falleció al no poder repeler el disparo, que le atravesó el pecho y le perforó el esternón, la cavidad torácica y el corazón.

El tutor del hijo de la víctima ha reclamado en su nombre una indemnización por daños y ha apuntado que el joven está bien, en un centro especializado y con secuelas, por lo que no declarará.

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El juicio, que se celebra con jurado popular, continuará mañana con la declaración de testigos y de peritos de las partes.