Tres cuadros de Joan Miró, una escultura de Jaume Plensa o un lienzo de Antoni Tàpies son algunas de las 45 obras de 25 artistas contemporáneos que se exhiben a partir de hoy viernes en Francesc Macià 10, en la exposición "Espejo de la ciudad", dirigida únicamente a inversores y coleccionistas.

Los promotores de esta iniciativa han explicado en rueda de prensa que se trata de la primera promoción "super prime" que se organiza en Barcelona, con obras de pintura, escultura y fotografía, con el objetivo de "acompañar el crecimiento del mercado del arte en Barcelona", tras caer las transacciones mundiales de obras un 22% en 2020 por la pandemia de coronavirus.

La muestra se ubica en las dos últimas plantas del emblemático edificio del número 10 de la plaza Francesc Macià, anteriormente de oficinas, diseñado por el arquitecto suizo Marc J. Saugey en los años sesenta, que actualmente gestiona la compañía Squircle Capital, tras una remodelación total a cargo de Marcio Kogan, para convertirlo en un inmueble residencial.

La exposición, que estará abierta hasta el 14 de noviembre, la han preparado la consultora The Art Büro, junto con la participación de nueve galerías barcelonesas: Marlborough, Ana Más, L&B, Joan Prats, Angels Barcelona, Víctor Lope, Alzueta, N2 y Galería Senda, así como de la madrileña Daniel Cardani.

Además de los ya citados, hay obra, alguna realizada expresamente para la ocasión, de Manolo Valdés, Luis Gordillo, Soledad Sevilla, Joaquim Chancho, José María Sicilia, Esther Ferrer, Joan Fontcuberta, Guillem Nadal, Amparo Sard, Blanca Muñoz, David Rodríguez Caballero, Regina Giménez, Jacinto Moros, Jordi Alcaraz, Laurent Lo, Jordi Bernardó, Massimo Vitali y Gino Rubert.

También de los jóvenes Xavi Muñoz, Yago Hortal, Carla Cascales y Laura Paiva, quienes ya han empezado a hacerse un nombre en la escena internacional.

Flotando muchos de los lienzos y esculturas en un espacio con unas vistas inalcanzables de Barcelona, gracias a la forma elíptica del edificio, los promotores de esta iniciativa han desvelado, a preguntas de los periodistas, que la obra más valorada es la escultura de Plensa, de unos 300.000 euros, mientras que los cuadros de Miró se sitúan entre los 39.000 y los 140.000 euros, y la obra de Manolo Valdés cuesta unos 235.000 dólares (moneda con la que trabaja este artista).

La fundadora de The Art Büro, Gabriella Sütöri, ha remarcado la "singularidad" de esta iniciativa en un momento en el que "tras sufrir mucho todos los sectores del arte, ahora hay que repensar colaboraciones para que el arte llegue a más audiencia".

Para Mariella Franzoni, también de The Art Büro, se trata de "crear un puente, colaborar con las galerías de arte, que son agentes fundamentales del sistema artístico y del ecosistema de la cultura, y acomodar un proyecto tanto a nivel arquitectónico, como conceptual, respetando todos los protocolos de seguridad y privacidad".

Por otra parte, ha subrayado que todas las piezas que se exhiben se han colocado en los dos pisos utilizados teniendo en cuenta "que se integren perfectamente en el espacio y su diálogo con las vistas que hay".

La directora de la galería Malbourough, Mercedes Ros, ha agradecido poder participar en el proyecto en un momento de cambios y en una ciudad en la que "al no ser capital de estado, la iniciativa en este ámbito siempre la ha llevado la sociedad civil".

El codirector de la Galería Joan Prats, Olivier Collet, ha coincidido en la "importancia de que colaboren diferentes instituciones y espacios" para poder llevar a cabo iniciativas de este tipo.

A pesar de que la exposición se inaugura hoy, ha habido algunas visitas previas, las primeras y por invitación expresa, de residentes en otras plantas del edificio, y ya "ha habido interacciones" de cara a adquisición de obras, la más barata de las cuales está en torno a los 5.000 euros.