El Gobierno de Melilla insiste en la necesidad de retirar el monumento a los Héroes de España por imperativo legal, ya que considera que incumple la Ley de Memoria Histórica y es difícil que se pueda reinventar o resignificar mediante un concurso de ideas.
A preguntas de periodistas, la consejera de Educación, Cultura, Festejos e Igualdad, Elena Fernández Treviño, ha considerado que eso es algo que se puede debatir, pero también ha dicho que en el seno del Gobierno tienen muy claro que se debe retirar y que es difícil de resignificar.
Sin embargo, aunque ha asegurado que la Consejería de Cultura siempre se abre a escuchar a la ciudadanía y las diversas propuestas, ha insistido en que no es una decisión sencilla porque todo lo que significa ese monumento, desde la primera hasta la última piedra, tiene una clara significación lesiva para los intereses y sentimientos de gran parte de la población.
Según ha explicado, la idea de retirar el monumento debe pasar por el Pleno de la Asamblea antes de que acabe esta legislatura para que todos los grupos políticos representados consensúen qué se va a hacer con dicha estatua.
La consejera ha explicado que la retirada del monumento a los Héroes de España no es tan fácil como retirar la estatua de Franco, que se hizo mediante los servicios operativos de la Ciudad Autónoma, ya que en este caso habría que sacar un contrato mayor para ejecutar una obra con la que retirar primero el conjunto escultórico y después, parte de la piedra.
En cuanto al espacio que dejaría, Treviño ha avanzado que tienen un proyecto llamado La ruta de la Memoria o Lugares de la Memoria, que ya ha sido adjudicado y empezará en septiembre, y que consistirá en hacer un recorrido con códigos QR y pequeñas placas por los lugares que fueron especialmente significativos cuando estalló la Guerra Civil en la ciudad.