La directora general del Libro y Fomento de la Lectura de España, María José Gálvez, ha defendido este martes la importancia de destinar los fondos europeos a digitalizar el sector editorial, una tarea que, a su juicio, no significa "renunciar" a su esencia, sino "adaptarse al mundo en que vivimos".

Así lo ha señalado durante el Fórum Edita, un evento internacional organizado por el Gremio de Editores de Cataluña y la UPF School of Management para analizar los retos del sector editorial y que cuenta con 600 asistentes inscritos y dieciocho especialistas de diferentes ámbitos del mundo del libro.

"La digitalización no es renunciar a quienes somos como sector, sino adaptarse al mundo en el que vivimos", ha subrayado Gálvez, para quien los comunitarios Fondos Next Generation EU suponen una gran oportunidad para modernizar, internacionalizar y dotar de mayor resiliencia al sector.

"La digitalización es mucho más que un 'ebook' (libro electrónico). Supone digitalizar los procesos de edición y las formas de comercio con futuros lectores. Es digitalizar los medios de distribución y de logística, como se está haciendo a nivel internacional", ha dicho.

Tal como ha detallado, estos fondos se emplearán en proyectos que pivotan alrededor de seis ejes principales, como la modernización de las pymes, "un sector muy heterogéneo" que engloba desde "una librería de una persona a una editorial grande o distribuidoras" cada una de las cuales requiere de "respuestas distintas".

También se emplearán, ha indicado, para potenciar la transformación tecnológica del sector, ya que, según Gálvez, durante todo este tiempo "se han estado haciendo cosas punteras, pero no se estaban poniendo en común".

En este sentido, destaca la digitalización de contenidos y procesos, una alternativa que servirá para evitar que se pierdan "obras maravillosas en rincones recónditos", al tiempo que contribuirá a combatir la "frustración" de quienes no encuentran el libro que buscan.

De acuerdo con Gálvez, durante la pandemia se ha vendido mucho fondo porque apenas se lanzaban novedades, pero también se han generado "desafecciones" cuando los clientes no encontraban el libro que buscaban por antiguo.

"Hay que digitalizar para evitar que se genere esa frustración", ha resaltado la directora de Libro y Fomento de la Lectura, quien ha apostado también por "salir a buscar al lector" en lugar de "esperar que entre en la librería".

Los fondos se emplearán además en formación y en el fomento de la innovación, el desarrollo, la sostenibilidad y la internacionalización de las compañías, especialmente las pequeñas y microempresas, para que sean lo suficientemente resilientes como para no tener que cerrar la persiana cuando vienen mal dadas.

"Venga lo que venga en el futuro, hay que tener las herramientas y las fortalezas para que toda la industria pueda resistir y competir", ha subrayado.

Todos estos proyectos deben servir para integrar "herramientas de gestión editorial y mejorar los procesos de distribución", en la línea de las políticas públicas que el Gobierno está impulsando para "empujar y acompañar la aceleración de un sector muy vivo e innovador que inicia antes que otros las transformaciones y la modernidad", según Gálvez.

"Ahora toca generalizarlo (el cambio) a aquellos que no han tenido los medios, el tiempo o las capacidades", ha agregado.