La Asociación “Medicina y Persona” ha mostrado su profundo desacuerdo con la Declaración de la Organización Médica Colegial  sobre el Anteproyecto de Ley para la protección de la vida del concebido y de los derechos de la mujer embarazada. En dicha Declaración la OMC defiende la ley de plazos en vigor, que en la práctica reconoce al aborto como un derecho. Esta organización colegial, a la que pertenecen obligatoriamente todos los médicos, no considera que el feto sea un paciente siempre merecedor de los cuidados médicos. Sólo lo sería en caso de que así lo desee la madre. Por otra parte, la declaración defiende el supuesto de malformaciones para despenalizar el aborto, en abierta contradicción con lo dispuesto por la Convención sobre los derechos de las personas con discapacidad que reconoce el derecho a la vida de todos los discapacitados. Los profesionales sanitarios integrados en “Medicina y Persona” denuncian que la OMC no defiende el derecho de los médicos a la objeción de conciencia, hasta el punto de instar al Gobierno a restringirla. Denuncian que esta organización está más definida por la ideología que por el verdadero servicio al médico y al paciente, y concluyen recordando una frase del famoso médico y genetista Jerome Lejeune: la medicina ha luchado durante siglos a favor de la vida y de la salud contra la enfermedad y la muerte. Si cambiamos estos objetivos, cambiamos la medicina.