El calor se notará este viernes con más fuerza en las provincias de Sevilla, Toledo, Cáceres, Murcia, Jaén, Granada, Badajoz, Ourense y Pontevedra aunque todavía no alcanzarán valores de alertas, ha avanzado a EFE, Ana Casals, portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). En Madrid también se notará ese ascenso con una máxima que subirá hasta los 31 grados mientras que la mínima se quedará en 17 grados. Para mañana las temperaturas diurnas seguirán subiendo, con especial incidencia en el suroeste de Galicia y valle del Guadalquivir donde serán significativamente altas; por la noche, el calor se sentirá más en el tercio sur. Por capitales de provincias destacan Badajoz, Córdoba y Sevilla donde el termómetro marcará 36/37 grados centígrados. Casals ha subrayado que durante el sábado es probable que aparezcan algunos chubascos en el área de los Pirineos y de forma más débil y dispersa, en otras zonas de montaña de la Península. A partir del lunes se espera que aumente la inestabilidad en el interior peninsular, manteniéndose durante parte de la semana. Se desarrollarán intervalos nubosos de evolución diurna en el entorno de los sistemas montañosos mientras que los chubascos y las tormentas se desarrollaran en el extremo norte peninsular y en la cordillera Ibérica, zonas en las que podrían alcanzar intensidad fuerte. La meteoróloga ha detallado que de forma más débil y dispersa también se pueden generar chubascos en el área del sistema Central y en otras zonas de los tercios norte y este de la Península, especialmente en las sierras. En el resto de España, no se esperan cambios importantes en las temperaturas con cielos poco nubosos, aunque podría haber intervalos nubosos en el norte de Canarias y alguna lluvia débil ocasional en las islas de más relieve. La Aemet ha señalado que como consecuencia de las intensas precipitaciones caídas durante la semana pasada en numerosas zonas de España que registraron 100 litros por metro cuadrado en Gerona, 68 litros por metro cuadrado en Soria y 72 litros en Zaragoza entre otras, ha disminuido ligeramente el déficit de precipitación existente. El valor medio nacional de las precipitaciones acumuladas desde el pasado 1 de octubre hasta el 16 de junio de 2015 se cifra en 496 litros lo que representa en torno a un 9 por ciento menos que el valor normal correspondiente a dicho periodo cifrado en 544 litros por metro cuadrado.