Los Bomberos de Ávila, Protección Civil y operarios de la Diputación han trabajado para achicar agua de los pisos bajos y garajes de Muñogalindo, a la vez que para limpiar el barro dejado por la tromba de agua en las calles, donde también, han intervenido medios municipales y los vecinos de la localidad, dejando daños materiales que el alcalde de la localidad, Pedro Pablo Pascual, estima en 1 millón de Euros. En apenas dos horas cayeron en la zona 180 litros por metro cuadrado de agua y granizo, con una virulencia tal que desbordó los arroyos, hizo bajar las aguas del monte con una fuerza inusual y ocasionó una riada que arrasó la parte baja de Muñogalindo y Santa María del Arroyo, afectando en menor medida a pueblos como Padiernos.Afortunadamente, la única atención sanitaria a personas ha sido una crisis de ansiedad. La diputación provincial de Ávila esta contribuyendo a la limpieza de los municipios afectados por la riada con 16 operarios y material pesado, en concreto dos palas, una niveladora, dos retroescavadoras, una pala telescópica, una barredora, tres camiones y dos góndolas. El presidente de la diputación, Jesús Manuel Sánchez Cabrera, ha supervisado este dispositivo de forma personal y ha visitado desde el primer momento a las localidades más afectadas por la riada, manteniendo un contacto constante con los alcaldes de los municipios afectados. El equipo humano y material de la Diputación se está centrando en la limpieza de puentes, cauces, calles y caminos, con el objetivo de restablecer la normalidad en los municipios del Valle Amblés afectados por las inundaciones.