Como requisito previo, se reconoce la necesidad de una revisión y puesta a punto de la tarea evangelizadora y por ello se ha convocado en todas las diócesis una jornada de ayuno y oración este viernes 22. El Obispo asegura que este día de oración servirá para “pedir la ayuda a Dios y disponernos a colaborar con todas nuestras fuerzas en la gran tarea misionera”. En el material distribuido en las parroquias se incluyen oraciones para las misas del viernes, en las que se ruega por la corresponsabilidad de todos los fieles, la labor de sacerdotes, padres de familia, misioneros y educadores en el anuncio de la Palabra, la revitalización de la eucaristía dominical y la acción caritativa que transforme la sociedad. El programa del Plan de Pastoral, aprobado por el pleno de la Conferencia Episcopal el 16 de diciembre, prevé dedicar este año, que coincide con el 50 aniversario de la creación de la CEE, a revisar todo lo que se hace a la luz de una “conversión pastoral”. En 2017 el tema central será la corresponsabilidad, en 2018 el anuncio de la Palabra de Dios, en 2019 la celebración litúrgica para hacer más viva, y en 2020 se concluirá con la dimensión social de la evangelización.