El cañón perdido de Fisterra resurge tras más de cuatro siglos bajo el mar

Un cañón de bronce de casi dos metros de longitud ha sido recuperado en Punta Sardiñeiro, Fisterra, y constituye un vestigio único de la Armada del Océano del siglo XVI

MINISTERIO DE DEFENSA


Ignacio Juanilla Bernardo

Madrid - Publicado el

3 min lectura

En aguas poco profundas frente a la costa de Fisterra, en la zona conocida como Punta Sardiñeiro, emergió recientemente un hallazgo arqueológico de gran relevancia histórica: un cañón pedreiro de bronce que formaba parte del armamento del galeón Santa María La Anunciada, hundido en 1596 durante una travesía destinada a reforzar la Armada del Océano.

La pieza mide casi dos metros de longitud y presenta una boca de 26 centímetros, característicos de los cañones diseñados para disparar proyectiles de piedra en la época. Su descubrimiento permite no solo conocer mejor la tecnología militar del siglo XVI, sino también reflexionar sobre la magnitud de los desafíos a los que se enfrentaban las armadas en travesías que combinaban combates, inclemencias climáticas y riesgos de naufragio.

El hallazgo se produjo a apenas 3,8 metros de profundidad, lo que permitió un operativo de recuperación relativamente seguro, pero que requirió de la coordinación de equipos especializados. La intervención no solo rescató el cañón, sino que permitió preservar el contexto histórico en el que se encontraba, garantizando que los restos submarinos se mantuvieran estables hasta su traslado.

Operativo conjunto para rescatar la historia

La recuperación del cañón fue posible gracias a un trabajo conjunto entre autoridades de patrimonio, fuerzas de seguridad y buzos especializados. Equipos de la Dirección Xeral de Patrimonio Cultural, junto con la Unidad de Policía Adscrita a la Xunta, la Armada con base en Ferrol y el Club de Buceo de Fisterra, coordinaron la operación para asegurar la extracción de la pieza sin comprometer su integridad.

Alamy Stock Photo

Finisterre, A Coruna, Galicia

El procedimiento incluyó la preparación de flotadores y sistemas de elevación para mover el cañón desde el fondo marino hasta la superficie. Cada paso estuvo supervisado por arqueólogos especializados en patrimonio sumergido, quienes inspeccionaron la pieza en busca de signos de deterioro, así como de posibles marcas o inscripciones que pudieran revelar información adicional sobre su fabricación o uso.

Además de rescatar el cañón, los expertos documentaron cuidadosamente el entorno, realizando un registro completo de su ubicación exacta y del lecho marino circundante. Este tipo de protocolos es esencial para conservar la memoria histórica y contextualizar el hallazgo dentro de la red de naufragios y rutas marítimas de la Galicia renacentista.

Del fondo del mar al Museo del Mar de Galicia

Una vez extraído, el cañón fue trasladado al Museo del Mar de Galicia en Vigo, donde será sometido a procesos de conservación y, posteriormente, exposición al público. La intención es preservar la pieza de manera que pueda ser estudiada por investigadores y admirada por visitantes, convirtiéndose en un símbolo tangible del patrimonio naval gallego.

Los especialistas señalan que estos cañones no eran meros instrumentos de combate, sino componentes fundamentales de la estrategia defensiva de los galeones. Cada pieza permitía repeler ataques enemigos, proteger cargamentos y mantener la hegemonía de las flotas en un periodo marcado por constantes conflictos navales y exploraciones ultramarinas.

El hallazgo también aporta información sobre la construcción de los galeones de la época, su distribución de armamento y la logística naval de la Armada del Océano. La conservación de este cañón permitirá futuras investigaciones sobre la vida a bordo de las embarcaciones del siglo XVI, incluyendo la formación de los artilleros, la estrategia de combate y los métodos de transporte y almacenamiento de pólvora y proyectiles.

El rescate del cañón de Fisterra representa, además, un símbolo de la recuperación de la memoria histórica, recordando los naufragios y los sacrificios de quienes participaron en estas travesías. Su exposición pública permitirá a las nuevas generaciones conectar con la historia marítima de Galicia y comprender mejor la magnitud de la navegación y la guerra en tiempos de imperios y descubrimientos.

En definitiva, este cañón no solo revive el pasado militar de la región, sino que también se convierte en un referente para la conservación del patrimonio subacuático, demostrando que los fondos marinos de Galicia aún guardan secretos capaces de enriquecer el conocimiento histórico y cultural del país.

UN LUGAR EN LA TIERRA

Si quieres seguir conociendo objetos históricos que se encuentran en distintas ciudades de España, no dejes de ver Un Lugar en la Tierra, que nos ayuda a descubrir la riqueza histórica, artística y espiritual del patrimonio de la Iglesia. Acompañado por expertos en arte sacro, por historiadores y testimonios locales. No te lo pierdas, los viernes a las 21:30 h, en TRECE y trecetv.es.

Temas relacionados