Santoral

San Anselmo de Canterbury

Su gran afán de estudio y de profundizar en los grandes saberes, le hizo escribir obras de Filosofía y Teología

Cualquier estudio sobre las Ciencias Sagradas es una manera de profundizar en el Misterio Salvador y así lo ha puesto Dios en el corazón de muchos Santos. Hoy celebramos a uno de ellos: San Anselmo. Nacido el año 1034 en Aosta, cerca de Toscana, su padre era un hombre imbuido en el paganismo, por lo que fue su madre, mujer de gran Fe, la que le educó en el temor de Dios.

El santoral de hoy, miércoles 21 de abril

Sus grandes deseos de aprender le llevaron a ser instruido por un maestro que le inculcó sus conocimientos con duras disciplinas, hasta que regresó enfermo a casa. Una vez recuperado fue llevado a unos benedictinos, quienes descubrieron su deseo de profundizar en el estudio. Así se iría fraguando su carisma y los planes que el Cielo tenía sobre él, ya que después de encontrar la oposición de su padre, a causa de su enfermedad, logrará entrar en el Monasterio Benedictino de Le Bec, en Normandía. Allí llegará a ser Abad del Convento.

Después de irse a Inglaterra, ocupará la Sede Episcopal de Cantorbery. El nuevo Obispo, que mostrará un gran celo por la difusión del Evangelio, se encuentra con algunos graves problemas que acechan a esa Comunidad Eclesial como es el abuso del poder político, frente a la Iglesia. Al hacer frente a esta situación con gran acierto y grandes frutos, tuvo que sufrir el destierro dos veces.

Su gran afán de estudio y de profundizar en los grandes saberes, le hizo escribir obras de Filosofía y Teología. Su profundización le llevó a escribir el Argumento Ontológico que es una de las pruebas aportadas al razonamiento humano para mostrar que desde la sola razón se puede llegar a conocer a Dios y demostrar su existencia. San Anselmo muere el año 1109.

dd/mm