León XIV alerta que el desarrollo de la Inteligencia Artificial "debe ir de la mano con el respeto a los valores humanos"

El Papa León XIV ha alertado de que unos 2.600 millones de personas no tienen acceso a las tecnologías de comunicación, en un mensaje enviado a los participantes en la 'Cumbre AI for Good 2025', organizada por la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT), que celebra este año su 160 aniversario.

El Pontífice quiso felicitar al organismo por "conectar a la familia humana a través del telégrafo, la radio, el teléfono, las comunicaciones digitales y espaciales", un reto que "presenta desafíos, especialmente en las zonas rurales y de bajos ingresos, donde aproximadamente 2.600 millones de personas aún carecen de acceso a tecnologías de comunicación".

El Santo Padre ha advertido de que la humanidad se encuentra en una encrucijada, enfrentando “el inmenso potencial generado por la revolución digital impulsada por la Inteligencia Artificial”. Un impacto, apunta Robert Prevost, que está transformando ámbitos como “la educación, el trabajo, el arte, la salud, la gobernanza, el sector militar y la comunicación", indica en su mensaje firmado por el secretario de Estado, el cardenal Pietro Parolin, en su nombre.

Se trata de "una transformación histórica que requiere responsabilidad y discernimiento para garantizar que la IA se desarrolle y utilice para el bien común, construyendo puentes de diálogo, fomentando la fraternidad y asegurando que sirva a los intereses de la humanidad en su conjunto".

 León XIV advierte que el desarrollo de la IA "debe ir de la mano con el respeto a los valores humanos"

El obispo de Roma agrega que la IA es capaz de adaptarse de manera autónoma a muchas situaciones mediante decisiones puramente técnicas y algorítmicas, lo que le permite “simular aspectos del razonamiento humano y realizar tareas específicas con una velocidad y eficiencia increíbles”, pero precisa que esto no implica “replicar el discernimiento moral ni la capacidad de formar relaciones genuinas".

Por lo tanto, León XIV concluye que el desarrollo de estos avances tecnológicos "debe ir de la mano con el respeto a los valores humanos y sociales, la capacidad de juzgar con conciencia limpia y el crecimiento en la responsabilidad humana”.

Para el papa, "aunque la responsabilidad del uso ético de los sistemas de IA comienza con quienes los desarrollan, gestionan y supervisan, quienes los utilizan también comparten esta responsabilidad" y requiere una gestión ética adecuada y marcos regulatorios centrados en la persona humana, "que vayan más allá de meros criterios de utilidad o eficiencia".

Todo ello contribuye, subraya, "a fomentar un orden social más humano y sociedades pacíficas y justas al servicio del desarrollo integral del ser humano y del bien de la familia humana", concluye.