El franciscano conventual navarro François Xavier Bustillo, nuevo obispo de Ajaccio (Francia)

En la mañana de este martes, 11 de mayo, el Papa Francisco ha nombrado obispo de Ajaccio (Córcega, Francia) al franciscano conventual navarro François-Xavier Bustillo. El religioso, de 52 años, era actualmente el guardián del convento de San Maximiliano Kolbe de Lourdes. Su consagración y toma de posesión tendrán lugar en la catedral la Asunción el domingo 13 de junio. Sustituye en esa sede a monseñor Olivier De Germay, nombrado el pasado mes de octubre por el Santo Padre arzobispo de Lyon.

François-Xavier Bustillo nació el 23 de noviembre de 1968 en Pamplona. Tras ingresar en el seminario menor de Baztán, inició el postulantado en la Orden de los Franciscanos Conventuales en Padua (Italia). Estudió en el Instituto Teológico de Sant?Antonio Dottore y se licenció en Teología en el Institute Catholique de Toulouse. Hizo su profesión solemne el 20 de septiembre de 1992 y fue ordenado sacerdote el 10 de septiembre de 1994. En este último año fundó junto a otros hermanos el convento de San Buenaventura en Narbona (Francia).

Miembro del Consejo Episcopal de la diócesis de Carcasona y Narbona entre 2007 y 2018, el P. Bustillo era actualmente guardián del convento de San Maximiliano Kolbe de Lourdes, delegado episcopal para el santuario de Lourdes y para la protección de los menores, y desde 2020 miembro del Consejo Episcopal de la diócesis de Tarbes y Lourdes.

Primeras palabras a los fieles

El nuevo obispo electo se ha dirigido en video a sus nuevos diocesanos para explicarles su procedencia ?"soy originario del norte de Navarra, junto al País Vasco, un lugar de raíces culturales sólidas, como en Córcega"?, detallarles su trayectoria y comunicarles su disposición a vivir junto a ellos la fraternidad, la amistad y la solidaridad en una sociedad tan crispada como la de nuestros días. Con respecto a su programa y proyecto para la diócesis, ha subrayado dos palabras clave: comunión y misión. Lo primero ?ha dicho? es la comunión. Buscar una iglesia sólida en el interior. "Y la segunda palabra es misión, una Iglesia capaz de proyectarse al exterior, sin arrogancia y sin complejos".

La diócesis de Ajaccio tiene una superficie de 8.722 kilómetros cuadrados y cuenta con unos 325.000 católicos (91% de la población). Integrada en la provincia eclesiástica de Marsella, en 2018 contaba con 434 parroquias, 69 sacerdotes (52 diocesanos, 17 religiosos), 55 religiosos, 16 diáconos y un seminarista.