Una feria para redescubrir la vida contemplativa: “Queremos que los monasterios puedan vivir de su trabajo”

 La Feria de productos monásticos de la Fundación Contemplare vuelve a la Plaza Mayor de Madrid durante el mes de diciembre. En ‘Ecclesia al Día’, la directora de la fundación, Alejandra Salinas, ha desgranado la misión y el trabajo que realizan para que los monasterios puedan “vivir de su trabajo y no de la caridad”. Este proyecto no solo busca la viabilidad económica, sino también poner en valor un patrimonio cultural y espiritual de incalculable riqueza, conectando a los conventos con la sociedad actual a través de las nuevas tecnologías.

El impulso de la venta online

Uno de los pilares de la Fundación Contemplare es su plataforma de venta online, un ‘marketplace’ que agrupa los productos de más de 200 monasterios y conventos de toda España. Alejandra Salinas ha explicado que este proyecto nació de la necesidad de dar una salida digna y profesional a la labor artesanal de las monjas y monjes. “Vimos que los conventos vendían sus productos de una manera muy precaria, sin una estructura comercial adecuada”, ha señalado. La fundación se encarga de todo el proceso: desde la fotografía de producto y la creación de contenido hasta la logística, el empaquetado y la atención al cliente. De esta forma, las comunidades religiosas pueden dedicarse a lo que mejor saben hacer: elaborar productos de altísima calidad con recetas y técnicas centenarias.

una ayuda más allá de la venta

La labor de Contemplare va mucho más allá de ser un mero intermediario comercial. La fundación ofrece un asesoramiento integral a las comunidades para que puedan optimizar su producción y adaptarse a las demandas del mercado sin perder su esencia. Esto incluye ayuda en la gestión de costes, la búsqueda de materias primas de calidad o el desarrollo de un ‘packaging’ atractivo. “Les ayudamos a poner en valor su trabajo, a que el etiquetado sea bonito y a que el precio sea el justo”, ha afirmado Salinas. Este acompañamiento es fundamental para que los monasterios no solo vendan más, sino que construyan una marca sólida y reconocible que garantice su futuro.

La artesanía monástica es un tesoro por descubrir"

Alejandra Salinas

Directora de la Fundación Contemplare

En la entrevista, Salinas ha destacado la extraordinaria calidad y variedad de los productos que se pueden encontrar en el portal de la fundación. Desde dulces y mermeladas hasta cosmética natural, pasando por cerámica, textil o productos de cerería. “La artesanía monástica es un tesoro por descubrir. Son productos hechos con un cariño, una paz y una materia prima excelentes”, ha subrayado la directora de Contemplare. Además, ha querido romper con la idea de que estos productos son exclusivamente para un público religioso. “Son para todo el mundo que valore la calidad, lo artesano y el producto local. Comprando estos productos, no solo adquieres algo único, sino que ayudas al sostenimiento de los monasterios y a la conservación de un patrimonio cultural y espiritual”.

A pesar del éxito cosechado, la Fundación Contemplare enfrenta importantes desafíos. El envejecimiento de las comunidades religiosas y la falta de relevo generacional son una amenaza real para la continuidad de muchos monasterios. Por ello, la fundación también trabaja en la sensibilización y la captación de fondos para poder acometer proyectos de rehabilitación de edificios o la mejora de los obradores. Alejandra Salinas ha concluido la entrevista en ‘Ecclesia al Día’ con un mensaje de optimismo, animando a la sociedad a descubrir y apoyar la labor de estos centros de vida contemplativa. “Son faros de luz en nuestra sociedad y tenemos la responsabilidad de ayudar a que esa luz no se apague”. La iniciativa de Contemplare demuestra que tradición y modernidad pueden ir de la mano, y que la digitalización es una herramienta poderosa para preservar el legado y asegurar el futuro de los monasterios españoles.