Se infiltra en un grupo de Telegram y se queda sin palabras al ver lo que venden: afecta a nuestra seguridad
Hablamos con dos expertos en ciberseguridad que nos explican cómo podemos reforzar nuestros métodos para protegernos ante cualquier amenaza
Publicado el
4 min lectura
A todos nos surgen miedos a lo largo de nuestra vida que tenemos que tratar de superar a toda costa, pero que, a veces, puede imposibilitar nuestra vida. Por eso, siempre intentamos tomar todas las precauciones posibles para minimizar los riesgos.
Si hay un miedo que todos podemos tener, ese es sin duda, a que nuestra seguridad se vea gravemente afectada y podamos, incluso, perder la vida. Tranquilo, aunque es un miedo muy humano, se puede superar y se pueden, sobre todo, tomar medidas para reforzar tu seguridad.
Por ejemplo, si tienes miedo a que te roben, puedes poner alarmas en tu casa o en tu vehículo, e incluso cámaras de seguridad que te ayuden en esta tarea. Sin embargo, estas tecnologías nos han permitido tener mucho más que seguridad.
Las cámaras que instalamos en casa, muchas veces, nos sirven para vigilar a nuestros mayores cuando se quedan solos en casa, a nuestras mascotas, o para ir chequeando de vez en cuando el estado de la casa.
Y aunque parece algo idílico e inocente, las cámaras de seguridad pueden acarrear muchos otros problemas. Y es que se han reportado bastantes casos de hackeos a estas cámaras que nos dejan en una absoluta situación de vulnerabilidad.
La vulnerabilidad a la que nos exponemos
Diego compró cámaras de vídeovigilancia porque quería tener bien vigilada su casa y, durante unas vacaciones, detectó una avería que le dejó sin imagen. Asustado por no poder acceder, decidió regresar a casa y ver qué había pasado.
Lo cierto es que había habido un apagón por el que el termo y la nevera de su casa había quedado inutilizada. Sin embargo, él sabe que es una puerta de entrada a los ciberdelincuentes, por lo que decidió protegerlas.
“Las tengo protegidas por todos los problemas que hay de hackers que pueden conectarse a la cámaras, coger imágenes y publicarlas. Las tengo con sistemas de seguridad, claves encriptadas para poder acceder a ellas” confesaba.
Pero lo cierto es que no todos tienen esa capacidad para proteger sus cámaras. Según el Instituto Nacional de Ciberseguridad, en España se han registrado 70.000 incidentes en estos dispositivos domésticos.
Lo peor de todo es que no solo nos pueden espiar, sino que nuestras imágenes pueden quedar en la dark web y servir de contenido para personas perversas.
María Aperador es criminóloga Experta en Delitos Digitales y explicaba en 'La Tarde' que es bastante “fácil acceder a las cámaras. Algunos dispositivos están abiertos a cualquier persona e indexados en Google”.
¿Se puede detectar si nos espían?
Es posible que tú tengas una de esas cámaras de vídeovigilancia, puede que te haya entrado miedo de que estén hackeadas y te hayan estado viendo. Pero lo cierto es que no necesariamente.
Esta experta explica que no necesariamente las cámaras de seguridad tienen que estar hackeadas o ser vulnerables a los hackeos, pero que, por desgracia, es difícil de detectar.
“Es casi imposible detectar si tenemos la cámara hackeada, lo que hacen es no moverlas ni activar luces para que no sepan que las están viendo” explicaba.
Por eso, le preguntamos cómo podemos saberlo y cómo podemos reforzar esa seguridad. Lo mejor sería contratar un servicio de una empresa de alarmas, aunque no están exentas de poca seguridad.
Video thumbnail
“Pueden ser atacadas, pero tienen más seguridad” decía. Y si aún no sabes si tus cámaras son seguras, lo que propone es que contrates a un técnico de ciberseguridad para que te haga una auditoría. “También cambiar la contraseña cada cierto tiempo, estamos poniendo en casa dispositivos que son peligrosos” explicaba.
Aunque difundir tus imágenes por la dark web está penado, no es tan fácil perseguir estos delitos. Así pues, aquí entra en juego David Sanz, analista en Ciberinteligencia. Él persigue estos delitos y explicaba qué es lo que ha llegado a ver.
Una infiltración en la dark web que nos afecta a todos
Para que te hagas una idea, Telegram alberga canales de contenido ilegal de estas cámaras que acumulan hasta 30.000 suscriptores. Ahí, por desgracia, se venden imágenes que podrían ser de nuestra casa de lo más comprometidas.
Él ha llegado a infiltrarse en estos grupos y dice que no hay nada más desagradable. “Lo que me he encontrado es horrible, es un Gran Hermano de depravados, comparten los mejores momentos para ellos, íntimos, de menores y te dicen a qué hora y qué día para que puedan revivirlo, es muy surrealista lo que ahí se ve” confesaba.
Mensajería en Telegram
Resulta que hay links para ver en directo nuestras cámaras. “Existen canales de pago y canales colaborativos, ellos se van pasando y son gente de todo tipo, edades, colaboran compartiendo esas barbaridades” explicaba.
“Hay mucha variedad de canales, te puedes descargar los vídeos y al momento lo publican, incluso se pueden ver en directo y quedan para verlo en directo. Telegram es una dark web, hay de todo, se van denunciando los canales y van cayendo pero es muy difícil tumbarlos, hay muchos” decía.
Por desgracia, es difícil llevar a los tribunales a estos delincuentes. Eso sí, quería tranquilizarnos a todos: “ni todas son fácilmente accesibles, ni todas son fáciles de hackear”.