Susi Boix, politóloga: "Aunque Pérez Llorca sea presidente, apuesto porque no acaba la legislatura, la llave la tiene VOX y tiene interés en que se convoquen elecciones"
La renuncia de Carlos Mazón como presidente de la Generalitat Valenciana abre una crisis de gobierno donde el PP necesita a VOX para evitar la repetición electoral
Publicado el - Actualizado
4 min lectura
Justo 370 días después de la dana que causó la muerte de 229 personas en la provincia de Valencia, Carlos Mazón ha presentado su dimisión como presidente de la Generalitat Valenciana. "Sé que cometí errores, los reconozco, y voy a vivir con ellos toda mi vida. He pedido perdón, y hoy lo vuelvo a repetir, pero ninguno de ellos fue por cálculo político o por mala fe", ha afirmado en una declaración institucional sin preguntas.
Escucha el tema del día
Mazón dimite tras la gestión de la dana
Mazón ha asegurado que asumió el "desgaste" desde el principio y que no dimitió antes porque creía que desde la presidencia le "sería más fácil demostrar la información de la que no dispusimos". En su comparecencia, ha apelado a la "responsabilidad" de la mayoría parlamentaria que conforman el PP y VOX en las Cortes Valencianas para elegir un nuevo presidente y dar continuidad a la reconstrucción.
La llave de la gobernabilidad
Tras la renuncia, la pelota queda en el tejado de VOX, cuyo líder nacional, Santiago Abascal, ha dejado clara su postura. Abascal ha avanzado que no moverán ficha hasta que el PP se aclare internamente, asegurando que no ha habido "ningún contacto" y que el PP actúa como si dijera: "Aquí tienes lentejas, si las quieres bien, y si no, las dejas". Su mensaje ha sido contundente: "Que el Partido Popular parece que está en grandes disputas internas. Primero, que se aclaren entre ellos, y cuando deciden qué es lo que van a hacer o lo que van a proponer, entonces, y solo entonces, nosotros diremos cuál es nuestra postura".
El presidente de Vox, Santiago Abascal
Por su parte, el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha calificado la marcha de Mazón como "una decisión correcta" con la que "da una lección a los que jamás asumen nada". Feijóo ha denunciado la "cacería política y personal" que, a su juicio, ha sufrido el ya expresidente. "Un compañero que ha reconocido equivocaciones, pero que también ha sufrido una cacería política y personal que debemos denunciar con toda intensidad. No es un asesino. Cometió errores, sí, hoy los asumió hasta las últimas consecuencias", ha defendido.
El proceso para la sucesión ya está en marcha. La presidenta de las Cortes, Llanos Massó (VOX), consultará a los grupos para proponer un candidato en un plazo de doce días hábiles. Si este no logra la mayoría absoluta en una primera votación, se requerirá mayoría simple en una segunda. Si en dos meses no se ha elegido a nadie, se convocarán automáticamente nuevas elecciones, que podrían celebrarse en marzo de 2026.
Los nombres para la sucesión
El futuro del gobierno valenciano ha sido objeto de análisis en el programa La Linterna de COPE, donde el jefe de redacción de COPE en la Comunidad Valenciana, Pascual Claramonte, y la politóloga Susi Boix han desgranado los posibles escenarios y candidatos. Este análisis pone sobre la mesa varios perfiles para la sucesión.
Todos los caminos parecen conducir a Juan Francisco Pérez Llorca, actual mano derecha de Mazón y alcalde de Finestrat. Considerado la "opción de la casa", cuenta con el visto bueno de VOX, con quien ya ha demostrado entendimiento en negociaciones pasadas, como los últimos presupuestos. Su perfil de "interino" podría ganar tiempo para que el PP afronte sin prisas la elección del candidato para 2027.
El portavoz del PP de Valencia y miembro del comité ejecutivo nacional, Juanfran Pérez Llorca
La otra gran candidata es María José Catalá, alcaldesa de Valencia y favorita de la dirección nacional del PP. Sin embargo, su nombramiento implicaría dejar la alcaldía de la capital a mitad de legislatura, un riesgo que muchos consideran demasiado alto. El tercer nombre en las quinielas es Vicent Monpó, presidente de la diputación de Valencia, un perfil que controla el aparato del partido pero cuya imagen no termina de cuajar entre el empresariado y la sociedad civil.
Una crisis marcada por la gestión de la dana
La dimisión de Mazón es la crónica de un final anunciado, marcado por los errores en la gestión de la dana. Uno de los episodios más polémicos fue el almuerzo que mantuvo con la periodista Maribel Vilaplana mientras la tragedia se desarrollaba. Mazón se ha defendido afirmando que no estuvo "incomunicado en ningún momento", pero ha admitido su principal fallo: "Debía haber tenido la visión política de cancelar mi agenda y desplazarme hacia allí [Utiel]".
La propia Maribel Vilaplana ha declarado recientemente que, durante la comida, Mazón se levantaba para mantener conversaciones, pero no recuerda "referencia alguna a palabras como lluvia, Cecopi o dana". Este testimonio se suma a las críticas que apuntan a que el expresidente no fue consciente de la magnitud de la crisis hasta que fue demasiado tarde.
El peor error que se puede cometer en una gestión de una crisis es no darse cuenta de que está en una crisis"
Politóloga
En este sentido, la politóloga Susi Boix ha señalado que el principal fallo de Mazón fue "no darse cuenta de que estaba en una crisis y que, por tanto, el primer punto a cometer era la claridad en la exposición de todos los hechos". Boix duda que la legislatura llegue a su fin, incluso con un presidente de transición como Pérez Llorca. "Teniendo la llave VOX, VOX en estos momentos tiene gran interés en que se convoquen elecciones, con lo cual puede forzar al Partido Popular a no tener un candidato que tenga los números", ha sentenciado.
Este contenido ha sido creado por el equipo editorial con la asistencia de herramientas de IA.