Hemos pasado en cero coma, del delito de sedición de la rebelión del golpe de estado a la bronca. La clave son los cinco años de condena por el chiste ese de los "desórdenes públicos agravados". El Gobierno elimina el delito de sedición del Código Penal y lo sustituye por una bronca.

Tras esa rebaja de 15 años a 5 años de la sedición a la bronca. Junqueras podrá presentarse a las próximas elecciones generales o catalanas. Lo que quiera.

Junto a Junqueras (que es quien manda), la Marta Rovira que se pega la vida padre en Suiza podrá volver como una reinona. Y el que faltaba pa' el duro Puigdemont que será el siguiente con rebaja, con 10 minutos en la cárcel (si es que viene) y con el indulto garantizado.

Nos hemos olvidado del golpe y del referéndum, de aquello del Parlament de Cataluña, del asalto a la consejería de Economía, del juicio en el Supremo, de la sentencia, del papel de los espías rusos en el procés.

Nos hemos olvidado de la batalla campal en Urkinaona o en Vía Laietana de Barcelona de los indultos y no queremos enterarnos de que "O tornarem a fet". Y es que, en efecto, si lo vuelven a hacer no pasará nada. Y lo volverán a hacer, si quieren y les conviene, desde el propio Congreso de los Diputados. Con tu dinero y el mío.

Y me quedan los barones: ¿Se van a tragar esto como si tal cosa? García Page, Lambán, Fernández Vara ¿Se van a comer este marrón sin decir ni siquiera "esta boca es mía"? ¿Serán capaces de humillarse así, bajo el manto de hermosura de su Graciosa Sanchidad mientras sube y baja del Falcon?