El secretario general de la Conferencia Episcopal y obispo electo de Ávila, José María Gil Tamayo, ha criticado la reforma del sistema educativo que pretende sacar adelante el Gobierno, y con la que elimina el criterio de "demanda social" para la escuela concertada y devalúa la asignatura de Religión.

En 'La Linterna de la Iglesia', Gil Tamayo ha dicho que no entiende "por qué la izquierda tiene que hacer menosprecio de la libertad". "La libertad y la igualdad están en el gran pacto educativo, que es del artículo 27 de la Constitución y es ahí a lo que hay que hacer referencia, no cargarlo ideológicamente para llevarse en beneficio de la propia ideología o de los propios intereses electorales algo tan serio como es la educación", ha añadido.

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El recientemente nombrado por el papa obispo de la diócesis de Ávila ha señalado que "el problema es político: la ideologización del ámbito educativo, en la que se quiere excluir el hecho religioso y no optar por una laicidad positiva que es la que consagra nuestra Constitución con la confesionalidad".

"Falta diálogo"

Además, el secretario general de la CEE ha recordado que en nuestro país hay un millón y medio de alumnos que cursan Religión, y 125.000 empleados, 30.000 profesores, "un colectivo con sus derechos laborales". "No hemos sido consultado de algo que nos afecta", ha denunciado.

Vuelta "a las andadas"

Gil Tamayo también ha lamentado que "se vuelva a las andadas" en España en esta cuestión: "Llevamos todo el tramo de vida democrática una especie de alternancia de no saber con la educación en este país, y que según el partido que esté gobernando, estamos de un lado a otro. Ya está bien". "Es hora de que nos enteremos de que necesitamos un gran pacto de la educación y no una ideologización al servicio de turno del partido que está en el gobierno o de los grupos parlamentarios que lo apoyen", ha pedido.  Además, ha defendido la libertad de los padres de elegir qué educación quieren para sus hijos

¿Dejará la secretaría general de la CEE?

Preguntado por si su nombramiento como obispo de Ávila supone dejar de ser secretario general de la CEE, Gil Tamayo ha respondido: "Está claro, esa fue mi intención y yo lo entendí así. Ese servicio a lo común ya lo he prestado. Soy un obispo nuevo, tengo que aprender a serlo y que poner en primer lugar a mi diócesis, que es lo que el papa me ha encargado".

hoy el elemento religioso forma parte ya no solo del hecho privado sino también de la construcción social y entonces lógicamente también en la vida académica y con el carácter académico que merece esa opción que por otra parte obedece  la libertad de los padres que quieren educar conforme a sus convicciones desde un principio constitucional y un derecho inalienable