Nunca hay que bajar la guardia...Esa fue la máxima de Pernell Whitaker, uno de los grandes de la historia del boxeo, quizá el mejor boxeador defensivo, gracias a su maestría para esquivar los golpes con su velocidad de piernas.

Con él no pudieron los puños deÓscar de la Hoya, de Julio César Chávez, de Roger Mayweather o del español Poli Díaz. Tampoco las drogas y el alcohol.

Lo ha tumbado un coche. Ha muerto atropellado en Virginia Beach. Tenía 55 años.

Negro, bajito, medía un 168. Musculoso, sin un gramo de grasa, con una zurda prodigiosa. Participó en 46 combates. Ganó 40; 17 por KO. Logró la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles. Y siempre soñó con ser Cassius Clay.

Fue campeón del mundo en cuatro categorías: ligeros, superligeros, welter y superwelter. Y acabó con Poli Díaz, el potro de Vallecas.

La pelea se produjo el 27 de julio de 1991, en Norfolk, Virginia. Ese día, España se paralizó. Poli había ganado 32 combates consecutivos. Aguantó los doce asaltos, pero besó la lona en el sép

Whitaker continuó su reinado seis años más hasta que perdió ante De la Hoya. Luego dio positivo por cocaína. Fue sancionado durante seis meses. Su carrera terminó al caer frente al puertorriqueño Félix Trinidad.

….Ya había comenzado a bajar la guardia.

Esta es la 'Historia del día' en 'Herrera en COPE'.