El expresidente del Parlamento europeo José María Gil-Robles ha considerado hoy que "no es razonable" la decisión de la Audiencia territorial de Schleswig-Holstein sobre el expresidente Carles Puigdemont, al haber descartado su extradición a España por un delito de rebelión.

Para Gil-Robles el tribunal alemán ha querido "sentar la posibilidad de censurar a los jueces de otros países", algo que no cree en absoluto razonable, por lo que ha pedido respeto entre las jurisdicciones de cada país ya que, de lo contrario, no se conseguirá establecer un espacio judicial europeo.

Durante su comparecencia ante la Comisión para la evaluación y la modernización del Estado autonómico, Gil-Robles ha dicho que hay que enmarcar esta decisión dentro de un problema más general que es el "pulso" que se juega entre algunas jurisdicciones nacionales, como la alemana, para que sus leyes prevalezcan sobre la europea.

Es en esta línea, en la que Gil-Robles enmarca la decisión del tribunal alemán y ha advertido de que para que la Euroorden o cualquier otra colaboración judicial en la UE sea eficaz es "indispensable" que las jurisdicciones de cada país respeten a las de los demás.

De lo contrario "no es posible", ha asegurado, tener un espacio judicial europeo que ve cada vez "más absolutamente necesario".

"El Tribunal Constitucional alemán ha jugado un pulso al Tribunal de Luxemburgo durante muchos años y solo en los últimos años ha empezado a ceder y reconocer que las leyes europeas prevalecen sobre alemanas", ha explicado Gil-Robles, quien ha añadido que el caso alemán no es el único en este pulso judicial con la UE.