Un incendio que arde desde hace más de diez días cerca del Parque Nacional de Yosemite (California) ha llevado a las autoridades de esta reserva natural estadounidense a cerrar el acceso a varias zonas del enclave protegido. Los responsables del turístico Yosemite, situado en la parte central de California, anunciaron hoy que las zonas de Yosemite Valley, Wawona y Mariposa Grove permanecerán cerradas desde el miércoles hasta el domingo.

Los visitantes que se encuentren ahora mismo en estas áreas del popular parque deberán abandonarlas mañana al mediodía como muy tarde. La autopista 140, una de las principales vías de acceso a esta reserva natural y varias zonas del condado de Mariposa, en el que se localiza Yosemite, han sido evacuadas como medida de precaución. El fuego, bautizado como "Ferguson" y que fue declarado el pasado 13 de julio al oeste de Yosemite, ha arrasado unas 14.800 hectáreas, según el último informe publicado hoy por el Servicio Forestal de Estados Unidos (USFS).

"La calidad del aire y la visibilidad se han visto severamente afectadas por las cenizas y el humo. Los visitantes tiene que tener esto en cuenta y limitar las actividades al aire libre durante los periodos de mayor concentración de humo", han indicado varios responsables del parque nacional Yosemite en su cuenta oficial de Twitter. Durante el fin de semana las llamas se encontraban a una distancia de entre 30 y 50 kilómetros del parque.

Alrededor de 3.300 efectivos de los servicios de emergencia se encuentran en la zona tratando de sofocar un incendio que ha dejado hasta el momento unas 12.000 hectáreas calcinadas y que ya ha sido controlado al 25 %. Un bombero que formaba parte del operativo para apagar el incendio "Ferguson" falleció el pasado 14 de julio. Aproximadamente 4,3 millones de personas visitaron Yosemite el año pasado, de acuerdo con los datos oficiales del Servicio Nacional de Parques (NPS).