Esta parcela, que estaba reservada para uso educativo, ha sido cedida por el ayuntamiento por 75 años a la Fundación Manantial, que hará frente a los 800 mil euros que cuesta la construcción de este nuevo centro que primará el uso de la luz natural, que dará empleo a 9 profesionales de manera directa y que podrá acoger a un total de 70 usuarios.

El presidente de dicha fundación, Francisco Sardina, ha destacado que a partir de ahora se empezará a trabajar, de manera que espera poder contar con el edificio en enero, aunque su apertura oficial dependerá del visto bueno de la conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas.

Por su parte, el alcalde de Vila-real, José Benlloch, ha destacado que la construcción de este edificio ayudará a fomentar la creación de un barrio socio-sanitario en la localidad, englobando en la misma zona diversos centros de atención.

Este CRIS se pondrá en marcha con pacientes con trastorno mental de todo el entorno de la Plana, tendrá horario diurno, y se centrará en rehabilitar a estas personas de manera que puedan permanecer sin problemas dentro de un entorno social. Para ello se realizarán numerosas actividades, donde se buscará inculcarles valores como la esperanza, la autodeterminación o la implicación en su recuperación.