Los ponentes de hoy han sido el doctor Antonio Llombart, catedrático de Histología y Anatomía Patológica y presidente de la Real Academia de Medicina de la Comunidad Valenciana, y la doctora Carmen Leal, secretaria general de esta institución, catedrática de Psiquiatría y miembro del Servicio de Psiquiatría del Hospital Clínico Universitario de Valencia. En su intervención, el doctor Llombart ha recordado a los numerosos estudiantes que han acudido a las charlas que el tabaquismo “es la mayor causa evitable de muerte en el mundo” y que tiene, además, un grave impacto sobre la salud pública. “Si la tendencia continúa, ha avisado el catedrático, morirán 500 millones de personas en el siglo XXI”. Ante lo apabullante de las cifras, el médico ha optado por darles la vuelta con el objetivo de concienciar a los jóvenes para que no caigan en este hábito: “Si no se fumara, se evitaría el 90% del cáncer de pulmón, el 20% de las muertes por enfermedades coronarias y el 80% por enfermedad pulmonar crónica”. Por el contrario, “el que empiece a fumar ahora, ha advertido, lo va a pagar seguro: en calidad de vida y en supervivencia”. El presidente de la Real Academia ha animado a los ya fumadores a acogerse a programas de deshabituación como los ofrecidos por entidades como la Asociación Española Contra el Cáncer. Por su parte, la doctora Leal ha abordado la importancia de la prevención en la salud mental a través de la implementación de los factores de protección que dependen de nosotros. Entre muchos otros, ha destacado la necesidad de procurarnos una buena salud física evitando las drogas (incluido el tabaco), incrementar la autoestima, practicar estrategias para afrontar el estrés, desarrollar buenas relaciones interpersonales y procurar una crianza adecuada. En este aspecto, la experta ha recomendado que el vínculo de padres e hijos “sea estable e incluya control, afecto e imposición de un modo equilibrado”. La psiquiatra ha señalado como grupos alto riesgo a las mujeres, los inmigrantes, los enfermos crónicos, los niños –sean víctimas de abusos o bien hijos de personas con trastornos mentales-, los adolescentes y los parados. Respecto estos últimos, Leal ha destacado la creciente demanda que están experimentando las consultas para atender a personas que han perdido el empleo y padecen irritabilidad, angustia e insomnio entre otros síntomas.