El Gobierno regional ha finalizado las obras de mejora de un tramo de 1,4 kilómetros de la carretera RM-711, que une Lorca con Caravaca de la Cruz, que han costado casi 1,4 millones de euros.
Han consistido en la creación de dos glorietas circulares y de un carril bici para uso compartido de personas y bicicletas, además de una banda de aparcamientos en línea, según ha dicho el consejero, José Ramón Díez de Revenga.
También ha incluido la demolición de las aceras existentes, la sustitución de las redes, y la renovación del pavimento.
Las nuevas rotondas han sido ubicadas en la intersección de la RM-711 con la RM-C15 (Lorca-Pantano de Puentes) y en la entrada al casco urbano por el barrio de San Cristóbal.