Las ordenanzas fiscales de 2024 ya están en vigor e incluyen novedades importantes para el bolsillo de los lorquinos, que pagarán un dos por ciento menos por el impuesto de bienes inmuebles (IBI).

El nuevo cuadro fiscal contempla una congelación general de los impuestos, tasas y precios públicos del ayuntamiento y el descenso de algunos impuestos de calado, como el IBI, en el que la rebaja será aún mayor, porque tampoco se ha aplicado en su revisión la actualización del índice de precios al consumo (IPC), lo que eleva la rebaja al ocho por ciento.

En el caso del IBI se crean nuevas bonificaciones para las familias monoparentales y se facilita el acceso a las bonificaciones a las familias numerosas.

En el caso del impuesto de vehículos de tracción mecánica la reducción será del 5,6 por ciento y estarán exentos de pago los vehículos con 27 años de antigüedad.

En cuanto al Impuesto de Construcciones y Obras (ICIO) se amplía la bonificación con que contaban las empresas ganaderas e industriales a las agrícolas para las que se emplacen en las pedanías del norte y del sur del municipio.

El ICIO bonificará con un 50 por ciento las obras de acceso y habitabilidad de viviendas para personas con movilidad reducida y las obras con interés de aprovechamiento térmico o eléctrico de energía solar.

El Impuesto de Actividades Económicas (IAE) también se rebaja casi un seis por ciento al no aplicar la subida del IPC.

Según el gobierno local los lorquinos se ahorrarán unos 3,5 millones de euros en 2024 por vía tributaria, aunque la oposición sitúa el ahorro en poco menos de 600.000.

El año 2024 también empieza con subidas de precios que afectarán al bolsillo de los lorquinos, como el incremento del 3.5 por ciento en el recibo del agua, ya que, aunque la empresa Aguas de Lorca mantiene congelada la tarifa, sí ha aplicado a la misma la actualización del IPC.