Persecución de locura en Pamplona: huye a 150 km/h, borracho, en un coche robado, en sentido contrario y embiste a la policía

Un hombre de 27 años fue detenido en la madrugada del lunes al martes por la Policía Municipal de Pamplona tras protagonizar una peligrosa persecución que incluyó conducción en dirección contraria por la autopista entre Imárcoain y Noáin, colisiones con vehículos oficiales y señales de estar bajo los efectos del alcohol. El conductor se enfrenta a múltiples delitos, entre ellos conducción homicida, hurto de uso de vehículo, resistencia a la autoridad y daños materiales.

Según ha informado la Policía Municipal, los hechos comenzaron alrededor de las 5:30 de la madrugada, cuando una patrulla detectó un vehículo circulando de forma irregular por la plaza de los Fueros, procedente de la avenida de Zaragoza. El coche no respetó la señalización de tráfico, lo que llevó a los agentes a intentar detener su marcha. Lejos de detenerse, el conductor aceleró bruscamente y se dio a la fuga, saltándose varios semáforos en rojo.

La persecución se intensificó cuando el vehículo tomó dirección hacia Zaragoza, alcanzando velocidades superiores a los 150 km/h, según el velocímetro del coche patrulla. Al llegar a las barreras del peaje de Imárcoain, el conductor realizó un giro brusco e inició la conducción en sentido contrario por la autopista, una acción que puso en grave peligro la seguridad del resto de usuarios de la vía.

Ante la gravedad de la situación, la Policía Municipal de Pamplona activó un dispositivo de seguridad conjunto con la Policía Foral y la Guardia Civil. Se procedió al corte del tráfico en la entrada de la autopista y se desplegaron medios para interceptar el vehículo, incluyendo señales luminosas, acústicas y el uso de tiras de púas, que lograron reventar una de las ruedas del coche en fuga.

A pesar de ello, el conductor continuó su marcha en dirección contraria, logrando acceder a la localidad de Noáin. En su huida, colisionó con un vehículo policial y dañó diversos elementos del mobiliario urbano. Finalmente, abandonó el coche y trató de ocultarse entre vehículos estacionados en las calles de la localidad. Fue localizado y detenido poco después por los agentes, quienes comprobaron que presentaba síntomas de estar bajo los efectos del alcohol.

Una vez trasladado a dependencias policiales, se le realizaron las pruebas pertinentes, arrojando un resultado positivo de 0,66 miligramos de alcohol por litro de aire espirado. En el test de drogas dio negativo. El detenido no portaba permiso de conducción y manifestó a los agentes que no disponía de él. Además, el vehículo que conducía había sido sustraído en el barrio pamplonés de la Rochapea, confirmando así el delito de hurto de uso de vehículo.

Pese a la extrema peligrosidad de la situación, no se registraron daños personales, aunque sí importantes daños materiales tanto en vehículos policiales como en mobiliario urbano. Tras finalizar las diligencias en comisaría, el joven fue puesto a disposición judicial. El juez decretó su puesta en libertad provisional, a la espera de juicio.

Este suceso ha causado una gran preocupación entre las autoridades locales, que han recordado la gravedad de este tipo de conductas al volante. Desde la Policía Municipal de Pamplona han subrayado la importancia de la cooperación entre los distintos cuerpos de seguridad para evitar consecuencias aún más graves en situaciones de este tipo.

La investigación continúa abierta y no se descartan nuevas imputaciones conforme avance el proceso judicial.