Un centro de estética en Logroño precintado por prácticas ilegales y peligrosas: La Policía Nacional detiene a la dueña que aplicaba sustancias prohibidas y ofrecía cursos para enseñar tratamientos que solo pueden realizar médicos
La Policía Nacional detiene en Logroño a la titular de un centro de estética por usar sustancias prohibidas y ejercer intrusismo. Se incautan ‘hyaluron pen’ y exosomas mientras investigan cursos de formación ilegales
Logroño - Publicado el
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La Policía Nacional ha detenido en Logroño a la titular de un centro de estética, acusada de ejercer intrusismo profesional y de administrar sustancias no autorizadas que suponen un riesgo para la salud. La investigación arrancó después de que el Colegio de Médicos de La Rioja denunciara las prácticas irregulares que se realizaban en el centro, alertando sobre la falta de titulación médica de la responsable y el uso de tratamientos no permitidos.
Desde la denuncia, los agentes han trabajado para recopilar pruebas y verificar los hechos. Tras el proceso de investigación, el pasado jueves 27 de noviembre se produjo la detención y el registro del establecimiento, situado en una céntrica calle de Logroño.
Tratamiento estético
Detención y registro policial revelan materiales peligrosos
Durante el registro, la Policía Nacional incautó varios dispositivos conocidos como ‘hyaluron pen’, utilizados para inyectar ácido hialurónico con la intención de aumentar el volumen de los labios. Este método inyecta el producto por alta presión, pero las autoridades sanitarias internacionales alertan de que no está aprobado y conlleva riesgos importantes para la salud.
Además, se encontraron y retiraron del centro diversos viales de “exosomas”, sustancias que tampoco cuentan con autorización para su uso médico estético ni están permitidas para microinyección. Todos los procedimientos se realizaban sin supervisión médica, contraviniendo la normativa vigente que exige titulación y colegiación para este tipo de tratamientos.
La Policía Nacional precinta un centro de estética y detiene a su propietaria por un delito contra la salud públicaREMITIDA / HANDOUT por POLICÍA NACIONAL DE LA RIOJAFotografía remitida a medios de comunicación exclusivamente para ilustrar la noticia a la que hace referencia la imagen, y citando la procedencia de la imagen en la firma01/12/2025
Los agentes también registraron todos los dispositivos informáticos del centro para realizar un análisis forense, con el objetivo de recabar pruebas sobre las prácticas ilegales y los cursos de formación que la titular ofrecía a terceros.
Cursos de formación y publicidad engañosa
El centro no solo aplicaba estas sustancias peligrosas, sino que la titular promocionaba en su web y redes sociales cursos de formación para enseñar a otros cómo realizarlas. Esto agravó la situación, ya que no solo ponía en riesgo la salud de sus clientes, sino que formaba a personas sin titulación médica para aplicar tratamientos ilegales.
La responsable, una mujer de aproximadamente treinta años, enfrenta cargos por intrusismo profesional y delito contra la salud pública. El primero se debe a que ejercía funciones médicas sin contar con la titulación ni la colegiación necesarias. El segundo, por la administración de sustancias prohibidas que podrían causar daños graves.
Este caso pone de relieve la importancia de acudir siempre a profesionales titulado y colegiados, así como de desconfiar de centros que ofrecen procedimientos estéticos o cursos de formación que parecen "fáciles" o rápidos. Los expertos recuerdan que tratamientos como inyecciones de ácido hialurónico o sustancias experimentales deben realizarse exclusivamente bajo supervisión médica y con productos autorizados por autoridades sanitarias como la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) o la FDA en Estados Unidos.
Un centro de estética en Logroño precintado por prácticas ilegales y peligrosas
Para la ciudadanía, la recomendación es clara: antes de someterse a cualquier procedimiento estético, verificar la titulación del profesional y la autorización del producto. Este caso de Logroño es un recordatorio de que la apariencia puede salir muy cara si no se toman precauciones y se confía en personas sin formación legal.