Miguel Soler: "Quiero ver a mi equipo como en la segunda parte y si nos ganan les damos la enhorabuena"

La eliminatoria no está terminada. Lo tiene claro el técnico de la UE Porreres, Miguel Soler, antes del encuentro de vuelta de este domingo en Monzón.

Los mallorquines van con una desventaja del 0-1 que encajaron en la ida en Ses Forques el pasado domingo. En el horno de Ses Forques ya que el partido se jugó a las 12h en plena ola de calor. 

Se está hablando mucho de las condiciones en las que que están afrontando los jugadores el Mundial de Clubes, y con razón, por jugarse en ciudades con temperaturas muy altas como Los Ángeles o Miami y en el caso del Real Madrid, 15h, una barbaridad, pero algo conocido en España, bien lo sabe el Mallorca, que jugó a las 14h en pleno verano. Otro tanto podríamos decir y con mayor motivo en el caso de una categoría de fútbol aficionado como la tercera RFEF, en la que los jugadores no son profesionales y no están tan preparados para afrontar esas condiciones extremas. 

Se jugó a las 12h y se jugará a las 12h el domingo en Monzón también, debido a los costes de desplazamiento, los clubes lo quieren así para evitar pernoctar dos días, ya que la Federación cubre el coste de billete pero no de estancia. 

El técnico del Porreres se mostraba sorprendido en Deportes Cope Baleares por la alta resistencia del equipo aragonés, que incluso pareció más entero que los suyos, cuando los suyos son mallorquines y están acostumbrados a las condiciones que se dieron el domingo en Porreres, muy por encima de los 30 grados y en pleno Pla de Mallorca. 

Lo que más descoloca al técnico es que no reconoció a su equipo en la primera parte, aunque sí se muestra contento con la reacción en el segundo tiempo, así que todo es posible el próximo domingo.

Miguel Soler admite que "tuvimos la suerte de que el portero estuvo acertado en el primer tiempo. Luego en la segunda con los cambios y de sistema, la gente vio que era posible, lo afrontamos de otra manera, no pudimos acertar en las ocasiones". 

El técnico dice que "la experiencia no la tenemos, es muy complicado subir ellos lo han intentado cinco veces y no lo han conseguido.  No tuvimos el adn que veníamos teniendo, debemos luchar y dar la cara que es lo que se merece este equipo. Quiero ver a mi equipo como en la segunda parte y si no tenemos que ascender pues le damos la enhorabuena pero siendo nosotros". 

El entrenador del Porreres, para quien está siendo muy emotiva esta etapa en el pueblo de su padre y en el que se aficionó al fútbol, quiere disfrutar este momento hasta el final: "Ahora a disfrutar el proceso y vivir cosas que no solemos vivir, viajando antes, durmiendo en hotel y disfrutando, no sabemos cuándo volveremos a jugar algo así. No debemos dejar de creer y que tengamos la conciencia tranquila que hemos hecho todo lo posible y el domingo no tuvimos esa sensación.  El jugador tiende a echarle la culpa a todo menos a nosotros mismos, tenemos que entrenar bien, preparar bien el partido y hacer lo que hemos hecho todo el año. Si después de todo eso el Monzón es mejor y asciende nos quedaremos con la conciencia tranquila, pero con nuestras armas y nuestra forma de jugar".