Mateu Jaume Morey: "Me emociono porque han sido muchos días muy difíciles"

Durante mucho tiempo fue conocido como Mateu Morey. En su periplo en la Bundesliga, a donde llegó siendo una joven promesa procedente del Barcelona, el mallorquín tenía como nombre futbolístico primer nombre y primer apellido. Incluso se simplificaba muchas veces denominándole por el primer apellido, Morey. 

De hecho, el de Petra aún aparece en muchos lugares como Mateu Morey. Pero el canterano del Mallorca pareció querer romper con el pasado, un pasado doloroso en el Borussia Dortmund, no porque el apellido tuviera nada que ver, quizá para quitarse el estigma del jugador marcado por las lesiones. De vuelta a la isla se puso Mateu Jaume en la camiseta. 

El lateral mallorquín demostró la pasada temporada que era un futbolista nuevo, que las diferentes cirugías en las rodillas por lesiones muy severas de cruzados, las lesiones que le tuvieron tres años sin sentirse futbolista, entre 2021 y 2024, eran cosa del pasado. 

El RCD Mallorca le dio la oportunidad de volver a sentirse futbolista con una temporada prorrogable que se extendió. En esta su segunda temporada, el de Petra tiene por ahora la responsabilidad en pleno "caso Maffeo",  jugador que ha venido siendo el titular pero que estudia ofertas para marcharse. 

Mateu no tuvo un debut afortunado ante el Barcelona, ya que pudo hacer algo más en el primer gol del Barcelona, de Raphinha, en la primera jornada. Ante el Celta, los bermellones estuvieron en serios apuros, tras una primera parte de intercambio suave de golpes en el sopor del calor de Agosto a las 17h (las cosas de LaLiga), se adelantaban los vigueses con un buen gol de Javi Rueda ante la mala salida de Leo Román. 

Cambio táctico.-

La cosa se puso cuesta arriba, el Mallorca mostraba todas sus carencias ofensivas cuando llegó el cambio táctico de Arrasate al descanso, hacía debutar a Kumbulla y pasaba a tres centrales. Ahí fue donde más brillaron Mateu y Mojica, especialmente el segundo, seguramente el mejor atacante del equipo. Ocurre que es lateral y que cuando está retenido por responsabilidad defensiva brilla mucho menos. 

El Mallorca generó sus ocasiones pero sería de la manera más insospechada cuando llegaría el gol del empate, un gol con denominación de origen mallorquín curiosamente. La puso Jan Salas profunda, la salvó en línea de fondo Marc Domenech, la peleó Abdón, quedaba un balón muerto en el área que Mateu Jaume tuvo tiempo de controlar y ejecutar con un gran tiro ajustado.  Una gran explosión de emociones para el jugador que hizo creer al equipo y la afición en la victoria. La pelearon hasta el final.

Mateu resumía con dificultad sus sensaciones nada más terminar el encuentro y con la voz quebrada en los medios del club: "me emociono y todo, porque han sido muchos días muy difíciles. Es un sueño poder marcar aquí en nuestra cas ante nuestra gente, con mi familia en la grada. Esto va por todos los que me han ayudado durante todo este tiempo. Ojalá este gol hubiera servido para tener los tres puntos, seguiremos luchando para brindarle a la afición estos tres puntos". 

Ya más calmado, decía ante el micrófono de COPE que "sentía mucha emoción pero ya pensaba en coger la pelota para intentar marcar el segundo, con la adrenalina que llevábamos, estábamos en un buen momento y pensaba en marcar el segundo".

De hecho, decía que "deberíamos habernos llevado los tres puntos, acaba de empezar y este punto nos da fuerzas para seguir, un buen momento para unir fuerzas con la afición. No me he encontrado muchas veces en esta situación pero he podido marcar. Hemos ajustado el sistema y hemos tenido más llegadas por bandas y ganar más segundas jugadas y creo que hemos merecido más".