Se va a vivir a Lyon y diez años después vuelve a Galicia para reencontrarse con su hija y retomar una tradición familiar

Zoila, que es emigrante retornada y pasó diez años en Lyon, ha tomado la decisión de emprender su pequeño negocio gracias a un programa autonómico de ayudas

Redacción COPE Vigo

Vigo - Publicado el

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La calle Barcelona de Vigo alberga desde enero pasado un proyecto que es mucho más que una simple floristería: La Boheme, el sueño hecho realidad de Zoila Martínez Pacheco, una gallega retornada de 46 años.

Tras pasar una década en la ciudad francesa de LyonZoila decidió regresar a su tierra en octubre de 2024 para emprender un nuevo camino profesional. Su historia, que conjuga arraigo familiar con experiencia internacional, se ha convertido en un ejemplo del espíritu que impulsa la Estratexia Galicia Retorna.

El establecimiento de Zoila fue recientemente visitado por el secretario xeral da Emigración, Antonio Rodríguez Miranda, quien destacó el valor de personas como ella que eligen Galicia "como lugar para vivir, emprender e construír futuro". 

Zoila, que proviene de una familia de floristas en Vigo, se vio obligada por las circunstancias a migrar a Francia hace casi una década, donde también desempeñó su actividad profesional como florista. Durante su estancia en el extranjero, donde se formó y trabajó, tomó la decisión personal de orientarse hacia la cultura y el idioma francés, lo que enriqueció su conocimiento profesional.

Xunta de Galicia

La Bohème, floristería de Vigo

LA MORRIÑA Y SU HIJA, MOTIVOS DEL REGRESO DE ZOILA

Pero el tiempo fuera la llamó de vuelta. El motivo principal de su regreso fue la familia. Tras años en el extranjero, deseaba una vida más tranquila y, sobre todo, recuperar la cercanía con su hija, que se había quedado estudiando en Vigo

Aunque confiesa que volver implica un sentimiento de miedo y "vértigo" —sintiendo que es como "volver a meter tu vida en otra maleta otra vez"—, la motivación de recuperar esa relación activa, y no limitarse a las videollamadas, fue clave.

EFE

Aeropuerto de Peinador (Vigo), foto de archivo

Con el objetivo claro de montar su propio negocio y modernizar las floristerías de Vigo, aportando su experiencia del mundo, Zoila se lanzó al emprendimiento. Ella se considera una persona emprendedora que ha trabajado mucho en su formación, habiendo estudiado y formado también en Madrid y Asturias

Su experiencia fuera de España le permite ofrecer una visión y una forma de hacer las cosas que es diferente a lo que se propone habitualmente, logrando un toque especial. Zoila disfruta de la creatividad que ofrece el oficio de florista, donde el límite es la imaginación, permitiendo mezclar colores, texturas e incluso elementos como maderas.

EL EMPRENDIMIENTO PARA BUSCAR ACOMODO LABORAL TRAS LOS 40

Al poner en marcha La Boheme en enero, Zoila invirtió todos sus ahorros, lo que supuso jugársela "a todo o nada". En este crítico primer año, la ayuda del programa Retorno Emprendedor de la Xunta de Galicia fue esencial. Tras consultar el papeleo necesario para regresar, Zoila recibió información detallada sobre las ayudas a las que podía optar.

La Xunta le concedió una ayuda inicial de 7.000 euros, una cifra que incluye el incremento de 1.000 euros por ser una mujer emprendedora. Este apoyo económico, que garantiza un "colchoncito", le proporcionó una "tranquilidad tremenda" y le permitió dormir mejor, mitigando la incertidumbre del inicio, mientras su negocio empieza a generar ingresos a través de las ventas.

COPE

Zoila, en la floristería La Boheme de Vigo con Antonio Rodríguez Miranda

El caso de Zoila destaca, además, por la importancia del apoyo institucional. Ella acudió a la Oficina de Retorno viguesa, que ha atendido a cerca de 6.000 personas desde 2020, y la experiencia fue "genial", recibiendo una atención muy detallada sobre el proceso. El programa Retorno Emprendedor ha apoyado cerca de 900 proyectos empresariales desde 2018, con una inversión superior a los 5,4 millones de euros.

Para Zoila, su ubicación en la calle Barcelona no es casual; es un barrio que le ha abierto "los brazos de par en par". Subraya la importancia del pequeño comercio para la vitalidad de la urbe. Vigo es, según ella, una ciudad maravillosa para vivir, con gente accesible y "campechana". 

El barrio funciona porque sus residentes son de ir a la mercería, a la pescadería y, ahora, a la floristería. Zoila insiste en que su negocio, como el de otros pequeños comerciantes, es fundamental para el asentamiento de la vida de barrio y para que este tipo de iniciativas puedan avanzar y no tengan que cerrar. A pesar de que el primer año es siempre el más complicado para cualquier negocio, Zoila avanza con "pasitos seguros, tranquilos, pero hacia delante siempre," aprovechando también herramientas como el recién concedido Kit Digital para impulsar su página web.

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