Confiesa que mató al hombre cuyo cadáver quemó y enterró en Cortegada

La mujer de 26 años, vecina del concello ourensano de Cortegada que en una consulta de Psiquiatría del CHUO afirmó haber quemado el cadáver de un hombre al que conoció a través de Internet, ha confesado hoy que lo mató.

Había mantenido en todo momento que sólo se había deshecho del cuerpo, tirando una parte del cadaver al río y enterrando la otra, pero hoy, voluntariamente, le dijo a la jueza y a la secretaria judicial que le había suministrado pastillas para dormirlo y que lo había asfixiado con una almohada.

La declaración está pendiente de ser ratificada en el juzgado y, mientras tanto, continúan las labores de rastreo en el domicilio y en las fincas aledañas a la casa, donde ayer fueron encontrados un pie y parte de una mano de la víctima, un hombre catalán de 53 años.

La Guardia Civil continúa buscando más partes del cuerpo por la zona.

Según fuentes policiales, la detenida no ha explicado el motivo del crimen, y se ha limitado a "explicar un poco cómo lo hizo", "incluso su abogado le sugirió que no declarase y ella pidió hacerlo ante la jueza".

En un primer momento, ella aseguró que se lo había encontrado sin vida y que decidió ocultar el cadáver, por nerviosismo, en vez de llamar a los sanitarios, pero hoy ha confesado ser autora de la muerte.

El hombre se había desplazado a Ourense el 24 de agosto y su madre había denunciado su desaparición en Cataluña tres días después, el 27 de agosto. La investigación llevaba meses activa y la Policía tenía a la mujer ourensana como principal sospechosa porque la Policía catalana descubrió el desplazamiento del hombre hasta la provincia de Ourense y, a partir de ahí, se estudiaron las ubicaciones del teléfono móvil que lo situaron en la vivienda de la mujer, donde se había perdido su señal y donde había sido visto con ella.

La joven pasará mañana, a las 10,00 horas a disposición judicial en Ribadavia.