Alfonso Villares, alcalde de Cervo y vicepresidente de la Federación Galega de Municipios y Provincias, piensa que el cierre masivo de sucursales bancarias en pequeños pueblos debe ser regulada y debe hacerse desde el Gobierno del Estado.

Lamenta que poco a poco se deja a los vecinos sin servicios y estas oficinas "no pueden estar campando a sus anchas".

"Ese dinero es nuestro"

Apunta que los bancos podrían poner unos ratios más bajos para mantener las entidades bancarias en lugares más pequeños. Además hay que tener un cuenta que "esas entidades tienen el dinero de todos los vecinos, un dinero que nos hace falta para nuestro día a día, y ese dinero es nuestro". Hay que prohibiirlo, hay que legislar para que eso no sea posible"

Piensa que la Administración pública puede hacerlo a través del Banco de España, y "legislar para impedir las tropelías que están haciendo".

Un caso como el que denuncia se produce en estos momentos en la zona de San Ciprián (Cervo), con una sucursal del BBVA.