Después de varios concursos públicos para ceder su explotación a una empresa privada y de comprobar que todos ellos quedaron desiertos, el Ayuntamiento de Lugo ha tomado la decisión de hacer una obra, valorada en algo menos de 30.000 euros, para hacer más atractiva a ojos de los empresarios de hostelería la cafetería con mejores vistas de la ciudad.

Se trata de la cafetería del Vello Cárcere, el centro cultural habilitado por el Ayuntamiento en la antigua cárcel modelo del partido judicial, una obra que supuso una inversión millonaria y seis años de trabajos de rehabilitación para convertir la vieja prisión franquista en una infraestructura cultural al pie de la Muralla romana y del casco viejo de Lugo.

La cafetería del Vello Cárcere, que lleva tres años cerrada, los mismos que lleva abierto el nuevo centro cultural, ofrece unas magníficas vistas de la Muralla romana, en concreto de la Porta de Campo Castelo y A Mosqueira, así como de buena parte del casco histórico de la ciudad, dado que está ubicada en el último piso del edificio.

Además de un local con cristaleras desde el suelo al techo, también ofrece una terraza exterior que domina la zona monumental de Lugo.

Sin embargo, a pesar de los sucesivos concursos públicos, con condiciones cada vez más favorables para los posibles adjudicatarios, hasta ahora nadie se ha atrevido a hacerse con la concesión.

Uno de los motivos es que, hasta ahora, esa cafetería carece de una entrada independiente, de modo que su horario de apertura tendría que coincidir con el del propio centro cultural y las salas de exposiciones, lo que limita notablemente las posibilidades de negocio.

Ahora, el gobierno local, que preside Lara Méndez, a firmado un contrato para mejorar sus accesos y posibilitar, de ese modo, que la cafetería del Vello Cárcere cuente con una entrada y una salida independientes.

Esa actuación ha sido adjudicada por un importe de 29.989 euros, después del trabajo realizado por el área de Arquitectura para buscar una solución.