Ocho meses de cárcel para el opositor al que filtraron un examen de la Diputación cacereña
La Fiscalía había solicitado cuatro años de prisión

El concurso-oposición se convocó para cubrir dos plazas de oficial en la imprenta de la Diputación de Cáceres
Cáceres - Publicado el - Actualizado
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La Audiencia Provincial de Cáceres ha condenado a ocho meses de prisión al opositor al que filtraron un examen de la Diputación de Cáceres y para el que la Fiscalía había solicitado cuatro años de prisión.
No obstante, la Audiencia Provincial le ha condenado por un delito de revelación de secretos en grado de tentativa porque el proceso de selección se paralizó antes de adjudicarse el puesto, por lo que no se causó daño ulterior a los opositores.
Se dispuso un sistema de concurso-oposición libre, mediante la convocatoria de dos plazas de oficial de imprenta en la Diputación cacereña, según fue publicado el 1 de junio de 2023 en el Boletín oficial de la Provincia (BOP).
Mientras que la Fiscalía sostenía que el acusado, “aprovechando la información privilegiada obtenida de un funcionario público o autoridad no identificado, recibió el modelo de examen y las preguntas-respuestas elaborado por uno de los miembros del tribunal de selección”; en la vista oral, el ya condenado negó los hechos y se “escudó en su amplia experiencia como impresor (23 años)”, según la sentencia, recogida por Efe.
De esta forma “justificó la perfección de su examen, tratándose de una materia con la que trabajaba a diario”. Sin embargo, según la sentencia, “los hechos hablan por sí mismos”, aunque “no tenemos prueba directa que nos indique la forma en la que el acusado obtuvo el examen, pero sí una amplia prueba indiciaria”, señala la sentencia.
El juez sostiene que el examen “es prácticamente idéntico al modelo de corrección”, y que así lo manifestaron los tres miembros del tribunal que comparecieron en la vista oral. “Se descarta que se diera el popularmente conocido como ‘cambiazo’ o pasara a limpio el examen porque eran folios numerados y sellados”.
El juez recoge en su sentencia que “lo primero que llama la atención es la limpieza”, ya que se trata de “un manuscrito; no tiene ninguna tacha dura, ni corrección”. Y subraya que, “en efecto, hubo una fuga de información” y que, “de acuerdo con lo manifestado por los testigos ésta solo se pudo producir entre los cinco miembros del tribunal, todos funcionarios públicos”, porque “solo ellos tuvieron acceso previo al examen”.