Se cumplen 5 años de la desaparición de Francisca Cadenas

Madrid - Publicado el - Actualizado
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José Antonio, el hijo de Francisca Cadenas, cuya desaparición cumple 5 años hoy lunes 9 de mayo, ha denunciando lo que a su juicio es una tremenda desigualdad entre los casos de desaparecidos en nuestro país. La Familia de Francisca pide más efectivos para esclarecer la investigación.
Su madre, de 1,60 metros de altura, 55 kilos de peso, rubia y con ojos verdes, desapareció cuando contaba con 59 años. Vestía mallas deportivas oscuras, camiseta de manga corta rosa y zapatillas de deporte la última vez que se la vio, a las 23:15 horas del 9 de mayo de 2017.
Su madre, de 1,60 metros de altura, 55 kilos de peso, rubia y con ojos verdes, desapareció cuando contaba con 59 años.
Vestía mallas deportivas oscuras, camiseta de manga corta rosa y zapatillas de deporte la última vez que se la vio, a las 23:15 horas del 9 de mayo de 2017.
Ha recordado que el caso lo llega la Policía Judicial de la Guardia Civil y ellos siempre han pedido que se haga cargo la Unidad Central Operativa (UCO), que participa de forma indirecta.
Se queja de que las reuniones con la Delegación del Gobierno se producen cuando quiere esta institución y no cuando lo pide la familia porque esté "desbordada psicológicamente" y necesite "calmar su ansiedad".
De hecho, ha manifestado que la última reunión fue hace un año, aproximadamente, a pesar de han hecho varias solicitudes desde entonces para mantener un nuevo contacto.
José Antonio ha indicado que la parte investigadora solo se reúne con su hermano Javier, ya que solo quiere tener un interlocutor.
A la familia, que siempre ha rechazado que la mujer se marchara de forma voluntaria, solo se le dice que tenga "paciencia y confianza" y que están poniendo todos los medios disponibles, pero el hijo de Francisca ha insistido en que sí es así "algo está fallando" y teme que la desaparición de su madre se quede sin resolver.
José Antonio ha subrayado que su padre está "mal" y ha recordado que su abuela Ana Márquez falleció sin saber qué le había ocurrido a su hija.
En un primer momento la engañaron y le dijeron que había sido ingresada, pero cuando llegó la Guardia Civil a la casa a coger pruebas de ADN se dio cuenta de algo estaba pasando y les pidió que le contaran la verdad, ha recordado su nieto.