Emilio, es un estudiante que se encuentra confinado en la residencia Galileo Galile de Valencia,y que partició en la fiesta que se celebró en la azotea la semana pasada y que ha originado un brote con 168 positivos, el mayor de la Comunitat hasta el momento que ha obligado a suspender las clases presenciales en la Universitat Politécnica de Valencia.

En declaraciones a COPE, Emilio relata que ahora, encerrado en su habitación, toma conciencia de la que se ha liado “nuestro trabajo era mantener las precauciones y hemos hecho todo lo contrario, reuniones en la azotea, en las habitaciones, y ahora que estoy encerrado en la habitación me doy cuenta del daño que hemos hecho”

Él ha tenido más suerte que otros compañeros y ha dado negativo en las pruebas PCR pero confiesa que el problema “lo hemos causado nosotros aquí, porque somos asintomáticos y tenemos el virus lo propagamos como si nada. Los jóvenes la lían mucho y por supuesto yo me incluyo”, asegura.

Respecto a la celebración de la fiesta en la que no se guardó ninguna medida de seguridad, Emilio explica que “era una fiesta sin más, la azotea era el único sitio donde se podía hacer la fiesta sin problemas, aunque los ha habido y graves”, insiste.

"En esos momentos se pensaba en hacer la fiesta y nada más, no en las consecuencias, y ahora hemos visto las consecuencias y cada uno se está dando cuenta del daño que hemos hecho por una fiesta más”

Entre sus compañeros de la residencia asegura que hay de todo “ hay gente que como él se da cuenta del problema, que es muy grave, y otros que siguen igual, “se la suda”, si puedo decirlo así”. “Pero todo el mundo debería concienciarse y dar la cara, el problema lo hemos causado esto y deberíamos hablar, no escondernos”, añade.

Emilio reconoce que cree que será “imposible saber quién fue el culpable, porque antes de eso se culparan unos a los otros”, y hace un llamamiento a la responsabilidad a toda la gente joven como él.

“Que la gente joven se de cuenta que aunque nos perdamos ahora un tiempo de fiesta, ya llegará que podamos hacerlas de nuevo, que nos preocupemos de nuestros estudios, y de nuestra vida y que se solucion esto que es un problema mundial”, del que no somos conscientes porque quizás no tenemos a nadie cercano que lo haya sufrido pero hay gente que lo está pasando mal y que se conciencien y actúen como tal”, pide Emilio.