Corberán confía en mantener a Mosquera esta temporada

Carlos Corberán quiere tener bien atada la plantilla cuando arranque la temporada. No quiere sorpresas. Asume que los mercados para clubes que no son transatlánticos, son complicados y suelen ir a los últimos días para buscar oportunidades de mercado y movimientos de piezas en otros clubes. Lo dijo en su última comparecencia al final de temporada, pero una cosa es asumirlo y otra es el conformismo y, Corberán no es conformista. Faltan entre cinco o seis fichajes. La principal preocupación es acertar el portero, el pivote y en el delantero. Pero más allá de los que tienen que llegar, la preocupación del míster son las posibles salidas.

El jueves Ron Gourlay se reúne con los agentes de Diego López, Javi Guerra y César Tárrega. Preocupa lo de Guerra pero, sobre todo, preocupa lo de Cristian Mosquera cuya negociación ya lleva varios capítulos consumidos. El central rechazó la oferta del club que le situaba en el tercer escalón salarial de la plantilla y el club ha rechazado la oferta que llegó del Arsenal cercana a los quince millones de euros. Pero los ingleses amenazan con volver y el Valencia asume que será difícil retener al futbolista. Y ahí es donde entra Corberán.

Tras la salida de Yarek al PSV, el técnico no está dispuesto a que se le desmantele la defensa. De hecho si no hubiera sido por la necesidad financiera del club no habría facilitado la salida de Yarek. Más aún, cuando partía con cuatro centrales de garantía, y ahora se puede quedar con dos y con la incertidumbre de la rodilla de Diakhaby siempre sobrevolando. Por eso, el míster lo tiene claro, lo idóneo sería que Mosquera se quedara, que el club hiciera un esfuerzo y el jugador también.

Por eso el técnico confia en poder mantener al central una temporada más. De momento el de Cheste ha ganado su primer ‘pulso’ que fue lograr desatascar la renovación de Foulquier por dos temporadas cuando el club ya había cerrado ese asunto. Ahora llega su segunda ‘petición’. Lógica por otra parte.

Entre Gourlay y Corberán hay muy buena sintonía de trabajo. De su etapa en el West Brom y desde que volvieron a encontrarse en casa de Peter Lim el pasado mes de mayo en el viaje a Singapur que acabó con el nombramiento del escocés como CEO de fútbol del Valencia CF. Gourlay tiene plenos poderes en la parcela deportiva otorgados por el máximo accionista, pero el ejecutivo quiere ir de la mano con el entrenador en la toma de decisiones. El caso Mosquera es una buena piedra de toque para demostrar que el binomio funciona y camina en la misma dirección.