La liberalización de la autopista trae consigo un grave problema y corresponde a la inseguridad que se viven en las tres únicas áreas de descanso que tiene este vial en la provincia. Sufren colapso lo que provoca un problema de inseguridad muy grave dado que, principalmente camiones, pero también vehículos, aparcan de forma irregular, lo que puede producir accidentes o atropellos, según se denuncia. 

Lo denuncia en COPE el secretario general de la federación que engloba a las asociaciones del transporte en España, Juan José Gil: "Desde que se liberalizó la AP-7, ahora mismo, la situación de las áreas de descanso del tramo de Castellón es de inseguridad viaria".

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Gil señala que estas áreas "solo tienen capacidad para 100 o 150 camiones y estamos hablando que hay unos 4.000 camiones que están colapsando las áreas de servicio, aparcando incluso en los márgenes de la autopista".

Cabe recordar que, aunque la Nacional 340 o la CV-10 disponen de áreas de servicio, los vehículos pesados tienen prohibido circular por la carretera nacional entre Nules y Oro pesa del Mar.

Ahora, la Federación de Transportistas, solicita que se revierta esta medida que se introdujo con tal de reducir la siniestralidad de un vial que contaba con un elevado número de accidentes y, obliga a los camiones que circulan de paso, a hacer uso de la CV-10, la autovía del interior, sumándose ahora la AP-7 desde enero.

 "Entendemos que la Dirección General de Tráfico debería resolverlo", explica Gil, quien considera que "tiene una forma muy fácil de resolverlo" y para él no es otra que "permitir que abandonen la autopista -los camiones- para ir a las áreas de descanso que hay en la carretera nacional".