La residencia de mayores de Dénia, entre la necesidad social y las sombras de un negocio encubierto

"El Debat Dénia" se convirtió en el escenario donde se abordó uno de los temas que más controversia está generando en la ciudad: la propuesta de Gent de Dénia para construir una nueva residencia de mayores. Una iniciativa que ha abierto un profundo debate político y ciudadano, y que, por ahora, mantiene el proyecto en el aire.

Durante el encuentro participaron representantes de todas las fuerzas políticas del Ayuntamiento: María Josep Ripoll (PSPV-PSOE), Rafa Carrió (Compromís), Pepa Font (PP), Félix Redondo (Vox) y Mario Vidal (Gent de Dénia). 

¿Una residencia... o un negocio?

Desde el PSPV-PSOE, Ripoll fue clara: “Hay que estudiar otras alternativas. Esta no es la solución adecuada al tratarse de un fondo de inversión con capital extranjero”. Una postura que comparte Compromís, que calificó la propuesta como “un negocio inmobiliario” y expresó dudas sobre su viabilidad social.

El Partido Popular, a través de Pepa Font, mostró una posición intermedia. “Quizás no han sido las formas”, dijo, en referencia a Gent de Dénia, pero llamó al consenso: “Tenemos que estar abiertos a escuchar. Si el equipo de gobierno necesita nuestra ayuda, estamos aquí”. Eso sí, matizó que “un partido político no debería haber lanzado esta propuesta”.

Desde Vox, la intervención fue directa: “Lo que a la gente le importa es tener una residencia”. Redondo planteó como posible salida una concesión administrativa, una vía que consideró complicada, pero necesaria. 

La defensa de Gent de Dénia

Mario Vidal, representante de Gent de Dénia, defendió la propuesta afirmando que no se trata de una gestión privada, sino de una empresa que “venía a ejecutar un proyecto”. Subrayó además que “no tiene por qué ser esta empresa; simplemente ofrecimos una posible solución”.

Vidal también criticó el enfoque del gobierno local, lamentando que el “plan B” del equipo de gobierno sea reclamar a la Conselleria el destino de los fondos europeos (Next Generation), en lugar de avanzar directamente en la construcción de la residencia.

 ¿Y ahora qué?

Lo cierto es que, tras el debate, la residencia de mayores en Dénia sigue sin una hoja de ruta clara. Las diferencias entre partidos son evidentes, y la presión social y política aumenta. Mientras tanto, el proyecto que debería garantizar un futuro digno a los mayores de la comarca permanece bloqueado.