Pickel gana puntos en un Espanyol de rotaciones

El Espanyol se ha marchado al tercer parón en este tramo de temporada sexto clasificado y ocho puntos por encima de la frontera que marca el descenso. No habría que ir mucho más allá en el análisis, teniendo en cuenta de "cómo estaba el equipo hace un año", según deslizan, acertadamente, desde el vestuario perico. Tras las doce primeras jornadas de la Liga 24-25, el Espanyol estaban 17º con 10 puntos. 

La derrota en Vitoria debió escocer más que la del sábado pasado frente al Villarreal. ¿Quién puede con los de Castellón? Muy pocos; salvo las excepciones de aquellos días raros como el del Pafos de hace una semana en Champions League. El Espanyol pudo marcharse al descanso 1-0 y se fue 0-1 con la sensación de haber remado mucho como para acabar ahogándose en la orilla. Luego llegó el avión llamado Buchanan, desnudando a un buen lateral como es José Salinas que, no olvidemos, disputaba el sábado su primer partido como titular en Primera. Habría que ir dimensionándolo todo.

Manolo González sabe perfectamente, y no se cansa de comentarlo, que su cargo va a depender siempre de los resultados. Qué esté tranquilo porque jugando como lo hace el equipo, en términos generales, la clasificación no debería pasar por ningún apuro durante esta Liga. 

En las últimas semanas, el técnico ha ido variando en la confección de sus alineaciones y no solo condicionado por las lesiones. Son méritos que hace un grupo de jugadores que, según nos cuentan, entrenan de maravilla y se ganan, casi todos, el favor del entrenador para poder tener una oportunidad en el once. Jofre y Roca la tuvieron en Vitoria y fueron suplentes el sábado. Riedel no estuvo bien en 'Mendi', jugando, de largo, sus peores minutos del año. Frente al Villarreal fue Calero el que regresó a un once en una Liga en la que sus méritos han sido muchos. Hasta Miguel Rubio estuvo muy acertado en los minutos de que dispuso. El caso del centro del campo es similar. Urko González de Zárate bajó el nivel y se fue al banquillo. Regresó el sábado. Parece haber llegado el momento de la consolidación de Pickel. El congoleño es dinámico, veloz y con criterios con el balón pese a que lleva alguna jornadas sintiendo molestias físicas. El hecho de que sea internacional y no pueda preparar las semanas con el Espanyol también es un condicionante que no sumar a su favor. Pero va a acabar jugando. Tiene mucho nivel.