La consultora immobiliaria Forcadell ha realizo su informe anual sobre la vivienda conjuntamente con la Universidad de Barcelona y el economista Gonzalo Bernardos, profesor de la misma. Bernardos augura que la vivienda caerá alrededor de un 16% durante el próximo año, una cifra importante aunque no alarmante. Las zonas que notarán más la caída seran las ciudades con una gran orientación al modelo económico turístico, que son también las más castigadas por la pandemia de la covid-19 que estamos viviendo. Así pues, Palma de Mallorca o Las Palmas de Gran Canaria serán dos de las ciudades más castigadas por esta bajada, y en menor medida, ciudades de la costa como Málaga o Valencia. Todas ellas estarán por encima de la media española.

Por lo contrario, Madrid y Barcelona, las dos grandes urbes del país, no corren el riesgo de quedar por encima de la media, ya que son ciudades muy potentes económicamente y hay inversos dispuestos a invertir capital aunque la situación sea incierta. Bernardos ha apuntado también que en las zonas periféricas las viviendas bajarán de precio más rápidamente, ya que en el centro y barrios acomodados las transacciones se llevan a cabo de manera más rápido y, por lo tanto, no hay tiempo para que los vendedores bajen el precio.

A parte de sus previsiones en el mundo immobiliario, Bernardos se ha mostrado optimista en relación a la crisis en España, dejando claro que es una cuestión médica y no financiera. Ha apuntado que la economía española actual es más sólida y no se basa en un modelo inviable a largo plazo, como pasó en 2008 con la burbuja de la construcción. Por lo tanto, cree que en dos años podríamos volver al PIB de 2019 y que la recuperación sera rápida en cuánto la pandemia se solucione.