El Departamento de Educación de la Generalitat garantiza el suministro de unas 64.000 mascarillas transparentes para que lleguen a colegios de Catalunya, con el objetivo de facilitar la comunicación entre alumnos y profesores.

La Federación de Asociaciones Catalanas de familias y Personas con Sordera (ACAPPS) ha explicado que las mascarillas están certificadas por laboratorios acreditados, “son seguras y eficaces contra la COVID” y cumplen con su función de permitir leer los labios. En este sentido, desde la asociación han recordado que los alumnos llevan casi tres meses sin ninguna mascarilla de este tipo, lo que hace más difícil que puedan seguir las clases, incluso si llevan audífonos o implantes cocleares.

La mascarilla que ha adquirido el Departamento de Educación es la que consiguió una mejor valoración en las pruebas que se hicieron por la Federación: prácticamente nueve de cada diez personas con sordera que participaron, aseguraron que era la que permitía leer mejor los labios. Consideran que el hecho de que haga falta, antes de su uso, poner espray para evitar el vaho o un poco de jabón antigrasa para evitar que se empañen "es un hecho menor ante los beneficios que aportará para una buena y eficiente lectura labial debido a que se trata de un material transparente".

Actualmente, y según los ultimos datos de Educación, hay 1993 alumnos escolarizados en modalidad oral (el 91% del alumnado con sordera) y 185 en educación bilingüe (en lengua de signos).

Conseguir estas mascarillas transparentes ha sido uno los caballos de batallas de la asociación, algo que no es fácil teniendo en cuenta que deben usar un determinado material transparente que cumpla con el protocolo antibacteriano y permita entrar y salir el aire. Hay que tener en cuenta que en Cataluña hay cerca de 180.000 personas con problemas de audición.