Los ayuntamientos del Baix Segrià reclaman vacunar contra la Covid-19 los trabajadores fijos de las empresas frutales de la zona, unas 4.000 personas, como "primer cortafuegos" para evitar episodios de transmisión comunitaria de la Covid-19 durante esta campaña y evitar que se pueda repetir la situación del año pasado. A la vez, piden que esta medida se complemente con tests serológicos a los temporeros que trabajarán este verano en la fruta. Los consistorios y entidades del sector han recogido estas demandas en una carta en la que también invitan el Secretario de Salud Pública, José María Argimon, para que conozca en primera persona los alojamientos para temporeros y la "realidad" de la campaña de la fruta en el Baix Segrià
Representantes de los siete municipios del Baix Segrià; las organizaciones agrarias JARC, Asaja y Unió de Pagesos; la Federació de Cooperatives Agràrias de Catalunya (FCAC); Afrucat; la Plataforma de la Fruita, y la plataforma Salvem la Pagesia-Defensem el Món Rural firmaron este jueves una carta en la que reclaman combinar la vacunación a los trabajadores de la fruta "indispensables", una vez garantizada la vacunación de las personas más grandes y más vulnerables, con tests serológicos a los temporales, a fin de que la campaña de este año se pueda desarrollar con normalidad.

El primer teniente de alcalde de Alcarràs, Manel Ezquerra, señala que, con este sistema de prevención que propone el territorio, se quiere establecer un "primer cortafuegos" con el que "se evitarían episodios como los que se vivieron durante la campaña de la fruta de 2020 "y que llevaron Salud confinar del Baix Segrià. "Aquellos confinamientos tuvieron graves consecuencias las cuales todavía sufren muchos sectores productivos", indicó.

A la vez, invitan Josep Maria Argimon porque "pueda conocer cómo se trabaja en el sector frutícola y como se solucionan las necesidades de alojamiento de los trabajadores de temporada y saque sus conclusiones", ha explicado el alcalde de Alcarràs, Jordi Janés. Los alcaldes del Baix Segrià consideran la apreciación hecha por el secretario de Salud Pública cuando dijo que lo que hacia falta eran "alojamientos dignos" para los temporeros de la fruta. Señalan que "podría solucionarse" cuando Argimon conozca en primera persona la realidad del sector.