El Centro Municipal de Protección Animal se ha visto obligado a restringir el acceso a sus instalaciones a visitantes y voluntarios, así como a tomar medidas de control y aislamiento de los animales para impedir la transmisión de un proceso vírico y la total recuperación de aquellos que se encuentran enfermos.

Los primeros síntomas se observaron a finales de la semana del 12 de agosto, cuando un "número significativo", según informa en un comunicado el Ayuntamiento de Valladolid, comenzaron a presentar un cuadro de vómitos y decaimiento. Entonces, se advirtió a los visitantes de las instalaciones del Centro que no tocaran a estos animales "a fin de evitar la propagación del proceso al resto de animales sanos". No fue suficiente y, finalmente, esa propagación se produjo a otros perros lo que ha obligado a, siguiendo las indicaciones de Sanidad Animal, restringir las visitas e intensificar la vigilancia veterinaria instaurada ya en el propio Centro de Protección Animal.

Tras lo ocurrido, el Ayuntamiento ha informado de que se procederá a sentar las bases para "regular" el voluntariado y, de eso modo, "evitar que se pueda repetir" otro proceso de características similares.

Con todo, la adopción de algún animal sigue habilitada a través de otros canales habituales, como el Prograda Adopta en la web municipal, donde puede solicitarse cita previa para formalizar la adopcación. Además, las instalaciones del Centro permanecerán abiertas en su horaria habitual para realizar otras gestiones.