“No dice nada”. “Es un canto al sol”. Así ha calificado la consejera de Economía y Hacienda de la Junta de Castilla y León, Pilar del Olmo, el plan de reindustrialización que ha remitido Vestas tras comunicar el cierre de su factoría en Villadangos del Páramo, en la provincia de León.

Para Del Olmo es “curioso” que la Compañía danesa, dedicada a la fabricación de aerogeneradores, garantice la recolocación de sus trabajadores en otras plantas de España al tiempo que decide prescindir de alrededor de 400 personas contratadas con carácter temporal en su fábrica de Daimiel. Esto es alrededor del 40 por ciento de toda su plantilla en la provincia de Ciudad Real. La “fiabilidad” de Vestas, ha advertido la consejera, “deja muchísimo que desear”.

La Fundación Anclaje, tras reunirse en el día de ayer con el director general de Industria, tiene previsto remitir a finales de esta semana su contrapropuesta al plan de reindustrialización presentado por Vestas. Una proposición “seria”, en palabras de la propia consejera, que permita conservar el mismo número de puestos de trabajo —362— que van a ser destruidos con el cierre de la factoría de Villadangos del Páramo.

La negociación con la Compañía, ha reconocido Del Olmo, será “difícil”. “Invierten, sacan todo el jugo a la inversión, sacan todas las ayudas que pueden y luego levantan el campamento”, ha sentenciado.