Restauran un fragmento textil que envolvía una reliquia de posible origen fatimí en la Catedral de Palencia

El Instituto del Patrimonio Cultural de España de la Dirección General de Bellas Artes y Bienes Culturales del Ministerio de Cultura y Deporte (IPCE) restauró un fragmento textil, de probable origen fatimí y fechado entre el 1025-1159, que envolvía una reliquia anónima descubierta en 2021 en la capilla de San Jerónimo de la Catedral de Palencia. Dicha pieza podrá ser contemplada hasta el 11 de diciembre en la exposición ‘Renacer’, con motivo del VII Centenario de la seo.

La investigación realizada sobre el tejido ha revelado que ha permanecido unido al relicario al menos desde el siglo XVII y que, si bien su uso originario pudo ser civil, posteriormente pudo emplearse como paño de hombros o velo humeral en la liturgia.

La subdirectora adjunta del IPCE, Susana Alcalde, explicó hoy en la seo palentina durante la presentación a los medios de comunicación que el tratamiento ha consistido en una limpieza mediante microaspirado y en la eliminación de arrugas y deformaciones con agua micronizada por ultrasonidos.

La consolidación del tejido se ha realizado colocando en su reverso un tul de crepelina de seda en color natural sujeto con hilo de seda, cuya transparencia permite apreciar la delicada ejecución del tejido original, aclaró.

Por su parte, la técnico responsable de la intervención, Esther Galiana, junto a la investigadora independiente, María Judith Feliciano, detallaron que se trata de un tejido, de 136 x 154 centímetros, que está realizado con urdimbre de seda y trama de lino con ligamento en tafetán de color azul teñido.

En uno de sus extremos presenta una banda decorada con motivos geométricos en amarillos, rojos y azules, así como elementos en negro. Contiene una inscripción que cambia en su manufactura desde los orillos hacia el centro, debajo de la cual se encuentra una transición de tejido en color natural y una nueva banda con decoración sobreteñida de azul.

Pieza excepcional

Ambas subrayaron que su gran tamaño, la calidad de su manufactura y su estado de preservación lo convierte en “una pieza excepcional”. Antes de utilizarse como envoltorio de reliquias, el tejido seguramente tuvo otros usos litúrgicos, tal vez como velo humeral (o de hombros), paño de altar o adorno del fascistol del coro.

Este tipo de tejido, con ricas decoraciones de medallones e inscripciones genéricas en árabe, se comercializó con enorme éxito en la península Ibérica durante el periodo medieval. En este caso, la banda de tapicería repite la frase all (al-mulk lillah, o ‘el poder/el reino es de Allah’).

La factura técnica y el color azul remiten a talleres egipcios, con el destacable detalle, en este caso, de que el azul se añadió tras la manufactura en el telar, sumergiendo expertamente la pieza ya tejida en una cuba de tinte evitando la banda más ancha de tapicería.

Aunque la posible manufactura en un taller andalusí no es descartable, la falta de paralelos y los detalles técnicos sugieren con probabilidad un origen egipcio.