Después de 60 años y la fabricación en este tiempo de más de 500.000 vehículos Nissan Ávila cierra una etapa para mirar al futuro. Mañana viernes, 9 agosto, será el último día de producción de camiones en la fábrica de Ávila, y de la planta saldrá el último camión, un NT400 Cabstar.

Tras seis décadas fabricando vehículos, a la vuelta de vacaciones en septiembre, Nissan Ávila retomará su actividad, pero en esta ocasión será para “acelerar el proceso de transformación en un centro especializado en la fabricación y distribución de piezas de recambio para la Alianza Renault-Nissan-Mitsubishi”.

Según un comunicado enviado por la empresa, la multinacional espera que la nueva fábrica alcance “su plena capacidad, en 2024, garantiza todo el nivel de empleo y contando con un volumen de producción de 80.000 piezas de recambios al mes para los diferentes modelos de las marcas de la Alianza en Europa”. En un vídeo de repaso por la actividad de la planta durante estos 60 años realizado por Nissan, Javier Novo, director de la planta en Ávila, ha asegurado que el proceso de transformación sigue su curso.

Del último modelo fabricado en Ávila, el NT 400 Cabstar, han llegado a producirse más de 170.000 unidades en sus diferentes versiones en la planta abulense. En el último año fiscal (abril 2018 – marzo 2019) la planta produjo 13.000 vehículos de este modelo, un 30% más que en el ejercicio anterior.

Historia de Nissan

Los orígenes de fabrica abulense se remontan al año 1956, con la constitución de la empresa Fadisa y la construcción del centro industrial, si bien no fue hasta tres años después, en 1959, cuando se inauguró la planta, que en una primera etapa fabricó vehículos Palten-Diesel. Más tarde, en 1967 la planta comenzó la producción de furgonetas de la marca Alfa Romeo.

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Fue ya a medidos de los setenta cuando Motor Ibérica absorbió Fadisa, dando a paso a la fabricación de un modelo de furgoneta totalmente español bajo las marcas Ebro y Avia.

En 1980 Nissan se convirtió en accionista mayoritario de Motor Ibérica. Desde entonces la compañía japonesa está relacionada con Ávila. El primer modelo de Nissan producido en la planta fue la furgoneta Nissan Trade en 1987.

En los años noventa, paralelamente a la producción de la Nissan Trade, se inició la producción de camiones de pequeño y mediano tonelaje. A esta etapa corresponde la llegada del modelo Cabstar, en 1998, y el Atleon, al año siguiente. La fábrica de Ávila se convirtió así en el centro de referencia para vehículos comerciales ligeros de la compañía en el continente.

En 2004 Nissan anunció un plan de inversiones para la fabricación de una nueva gama de camiones Atleon y Cabstar, que comenzarían a fabricarse dos años más tarde. Estos modelos fueron sustituidos en 2014 por los modelos NT500 y NT400 Cabstar, respectivamente, convirtiendo a Nissan Ávila en la planta madre a nivel mundial, como cuenta Álvaro Vidal.

Nueva etapa

Tras una etapa complicada para la fábrica de Ávila, en la que llegó ha hablarse incluso de cierre, fue en mayo de 2018 cuando se presentó transformación para la planta de Ávila en un centro especializado en la fabricación y distribución de piezas de recambio para la Alianza Renault-Nissan-Mitsubishi a partir de 2020. Desde hace ya varios meses, se combina la producción de camiones con la reconversión. Este nuevo plan industrial tendrá un presupuesto de 40 millones de euros.

60 años de historia y más de 500.000 camiones fabricados en este tiempo, entre los que destacan las furgonetas Alfa Romeo, Ebro, Avia y Trade y los camiones Cabstar, Atleon, Maxity, NT500 y NT400 Cabstar. Ahora 450 trabajadores, que dicen adiós a esta nueva etapa y que esperan que la fábrica, aunque con otra actividad, vuelva su máximo rendimiento y el 100% de pleno empleo en el año 2024.