Estornudos constantes, picor de ojos, goteo nasal... Son los principales síntomas que si tienes alergia al polen puedes estar notando desde el mes de diciembre. En los últimos meses estamos escuchando mucho que este año se han adelantado las alergias. Es una afirmación cierta a medias.

Nos lo ha explicado con Cope Ávila, la alergóloga del Hospital Nuestra Señora de Sonsoles, Sara Acero, quien ha detallado que este invierno a la alergia del polen de las arizónicas, propia de esta fechas, se ha sumado el adelanto del polen de las gramínias, cuya polinización no suele aparecer hasta mayo, pero que este invierno se ha anticipado a finales de febrero.

Es por este solapamiento de pólenes de arizónicas y gramínias, que las personas que tiene alergia a las dos cosas lo están pasando especialmente mal. Además se da la circunstancia de que si hace dos años la alergia a las arizónicas tan sólo duraba un par de semanas, ahora se está prolongando durante meses en el tiempo, con lo cual no hay tregua.

El responsable de este adelanto y cruce de alergias, tal y como nos ha confirmado la doctora Acero, no es otro que “este loco tiempo meteorológico que tenemos”.

Y cómo contra el tiempo meteorológico no podemos luchar, lo mejor es seguir los consejos y recomendaciones de la alergóloga: no exponernos al polen en las peores horas, que suelen ser primeras y últimas horas del día; cerrar las ventanas, usar gafas de sol, y en cuanto notemos los primeros síntomas tomar la medicación prescrita por nuestro médico. Las personas que ya tienen la vacuna, recuerda la doctora, “ya cuentan con protección”.