Víctor García, secretario general de la Unión Sindical de Policías y Bomberos de Las Palmas de Gran Canaria, ha asegurado en los micrófonos de COPE Canarias que, se enfrentan con determinación, al primer fin de semana sin estado de alarma y, por tanto, sin toque de queda, en Canarias.

“Tenemos presente que se va a establecer una nueva situación donde necesitaremos más efectivos”, advierte. Sin embargo, denuncia que en la capital grancanaria solo se refuerzan los servicios el fin de semana con 4 agentes. “Nos parece insuficiente. Parece que están haciendo un experimento a ver qué sucede, si el ciudadano cumple o no”.

Por su parte, Antonio Márquez, vicepresidente de la Asociación de Empresarios de Bares, Cafeterías, Restaurantes y Ocio de Las Palmas de Gran Canaria, insiste en que está contento porque se les ha permitido abrir una hora más, pero a la vez preocupados por lo que pueda pasar después de las 00:00 horas. “Que no haya toque de queda y la hostelería tenga restricciones es un sinsentido. Esperemos que los policías estén preparados para actuar en las fiestas que se celebrarán después de que cierren los bares”, ha apuntado.

El empresario de la restauración no comprende que si los bares y restaurantes estarán cerrados después de las 00:00 horas, se permita seguir circulando por la calle. “La gente tiene muchas ganas de socializar y si les impedimos hacerlo en mesas y sillas lo harán en fiestas privadas”.

Desde la Policía confiesan que el toque de queda ayudaba a mantener la situación controlada por la noche y ahora solicitan responsabilidad ciudadana. “Actuaremos con toda la determinación con las personas que entiendan que se pueden saltar las normas”, ha indicado Víctor García.

Los hosteleros creen que lo adecuado hubiera sido plantear una desescalada acompasada con la hostelería. “Somos parte de la solución, cuando no hay hostelería, qué sentido hay para estar en la calle”, pregunta Márquez.