El presidente del Principado, Adrián Barbón, ha asegurado este miércoles que "no está encima de la mesa" de su Gobierno un recorte del salario de los funcionarios, pero sí una reforma de la administración y del sector público que deberá analizar qué funciones pueden reducirse y cuáles es necesario reforzar.

Barbón se ha expresado en estos términos en el pleno de la Junta General en respuesta a una pregunta de la portavoz de Podemos, Lorena Gil, quien ha expresado su preocupación por una posible aplicación de recortes en los servicios públicos como consecuencia de la crisis del coronavirus.

Gil ha advertido de que sería una "gran injusticia" aplicar recortes o ajustes en el sector público cuando ha sido "uno de los grandes bastiones" en la lucha contra la crisis sanitaria y será "crucial en una recuperación con justicia social".

La portavoz de Podemos ha denunciado que en los últimos años se han producido externalizaciones en el Sespa, los servicios de limpieza, los comedores escolares o el mantenimiento de carreteras sin que se hayan visto mejoras en los servicios y sí un empeoramiento en las condiciones laborales de los trabajadores.

Tras advertir de que hay otros modos de introducir recortes como no cubrir las jubilaciones, Gil ha insistido en que "el sector público no debe adelgazar sino expandirse" para "proteger lo que es de todos".

El jefe del Ejecutivo ha sido tajante al afirmar que no habrá recortes salariales entre los funcionarios, pero ha insistido en una necesaria reforma del sector público en pleno siglo XXI porque "en ocasiones hay que transferir personal de unos departamentos a otros porque hay puestos que dejan de tener sentido".

Barbón ha criticado el "mantra" de Podemos de que "todos los puestos que hoy existen hay que mantenerlos porque sí", cuando quizás sean necesarios "más médicos y a lo mejor menos de otra profesión".

El presidente del Principado ha dicho que le encantaría contar con 50.000 servidores públicos pero que es algo que la administración "no se puede permitir" a no ser que el planteamiento de la formación morada pase por un "colapso" y una "quiebra" que suponga "despidos masivos".

Barbón, quien ha asegurado ser el primero en reconocer el trabajo realizado desde el sector público, ha lamentado que Podemos se cierre a una reforma que ve necesaria para afrontar el futuro y ha invitado a Podemos a entrar en "la propuesta más allá de la protesta" y a "imitar el comportamiento" de la formación morada a nivel nacional.