La Guardia Civil desarticula una red que esclavizaba a sus víctimas con una 'deuda impagable'
La organización captaba a las víctimas con falsas promesas de trabajo y las coaccionaba con enviarlas a Alemania para ser prostituidas si no obedecían

Sevilla - Publicado el
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La Guardia Civil, en el marco de la operación “Alborga”, ha desarticulado una organización criminal asentada en Marchena (Sevilla) que se dedicaba a la trata de seres humanos con fines de explotación laboral. La intervención, que ha contado con la colaboración de la Inspección de Trabajo, ha culminado con la liberación de catorce víctimas y la detención de seis varones por su presunta implicación en la trama.
La investigación arrancó el pasado 7 de octubre tras recibirse una información anónima que alertaba sobre la posible retención ilegal de una mujer. Las primeras pesquisas de la Unidad Orgánica de Policía Judicial (UOPJ) de Sevilla permitieron localizar a las primeras víctimas y corroborar la situación de vulnerabilidad, malos tratos y restricciones de libertad que sufrían.
Un sistema de esclavitud por deuda
Según ha informado la Guardia Civil, la organización captaba a sus víctimas en sus lugares de origen bajo la falsa promesa de un contrato laboral en la recolección de aceitunas. Una vez en España, se les imponía una deuda inicial de 2.000 euros que se incrementaba semanalmente de forma arbitraria, generando un mecanismo de esclavitud que imposibilitaba su liberación.
A las víctimas se les retiraba la documentación, se les impedía la libre circulación y se las obligaba a trabajar en jornadas extenuantes sin contrato y percibiendo salarios muy inferiores a lo estipulado. Además, los responsables de la red empleaban la violencia y las amenazas para coaccionarlas. Los investigadores señalan que se amenazaba a las trabajadoras con que serían enviadas a Alemania para ser explotadas sexualmente si intentaban huir o acudir a las autoridades.
operativo de la guardia civil
La fase de explotación de la operación culminó a finales de noviembre. Tras un dispositivo de vigilancia, la Guardia Civil, en coordinación con la Inspección de Trabajo, interceptó a los integrantes de la red en dos fincas agrícolas del término municipal de Marchena.
Se constató que los trabajadores realizaban sus labores de forma irregular y residían en una vivienda que presentaba condiciones de habitabilidad penosas. La operación permitió la identificación y protección de catorce víctimas de explotación laboral
Como resultado de la investigación, se ha detenido a seis individuos de entre 28 y 43 años. A uno de los detenidos se le atribuye, adicionalmente, un delito de agresión sexual continuada sobre las dos denunciantes iniciales. Los detenidos, junto con las diligencias instruidas, han sido puestos a disposición de la Autoridad Judicial competente.
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